Los funerales y el entierro del presidente polaco, Lech Kaczynski, y su esposa Maria, fallecidos hace ocho días en accidente aéreo, tendrán lugar este domingo en Cracovia con la ausencia masiva de la mayoría de los estadistas mundiales que habían anunciado su presencia en las exequias.

La nube de ceniza volcánica que paraliza el tráfico aéreo en una gran parte de Europa ha hecho suspender su viaje a Cracovia al presidente estadounidense, Barack Obama, pero también a lideres geográficamente mas cercanos como el presidente francés, Nicolas Sarkozy, o la canciller alemana, Angela Merkel.

El rey Juan Carlos de España, el príncipe de Gales o el rey Carlos Gustavo de Suecia forman parte también de la ya larga lista de personalidades que han suspendido su desplazamiento a la localidad del sur de Polonia, anunció un portavoz del ministerio de Exteriores en Varsovia.

En un principio habían anunciado su presencia en los funerales del presidente polaco altas representaciones de 98 países, aunque desde primeras horas de la tarde del sábado comenzaron a sucederse las cancelaciones, empezando por los países mas alejados como fue el caso de Nueva Zelanda, Japón, Corea del Sur, Pakistán o la India.

Preparativos

Mientras tanto, en Cracovia se ultiman los preparativos para las exequias fúnebres del matrimonio Kaczynski, que comenzarán a las 14.00 horas locales (12.00 GMT) frente a la basílica de Santa María con la misa por las almas de la pareja presidencial, oficiada por la curia polaca.

Al igual que este sábado en Varsovia en la ceremonia civil y religiosa en memoria de las 96 víctimas de la tragedia de Smolensk, se espera que en Cracovia se concentren miles de ciudadanos de toda Polonia que acudirán para dar su último adiós a su jefe del estado. Tras el funeral, los restos de los Kaczynski serán trasladados en un cortejo fúnebre hasta el Castillo de Wawel de Cracovia, donde serán enterrados en una ceremonia restringida a los familiares y a las personalidades más relevantes.