Cliff Richard sacrificó un amor juvenil por la carrera de cantante, según una carta enviada desde Melbourne (Australia) y con fecha del 21 de octubre de 1961, que publica este sábado la prensa británica.

En ella, el cantante, que tiene hoy 69 años y nunca se casó, le confiesa a su novia de entonces, Delia Wicks, haber tomado "seguramente una de las mayores decisiones" que tendrá que tomar en su vida.

"Siendo un cantante, deberé renunciar a muchas cosas en la vida. Pero como cantante pop, tendré que renunciar a algo que no tiene precio: el derecho a tener una relación duradera con una muchacha especial", escribió entonces Richard.

"Delia, tienes que encontrar a alguien que esté libre para quererte como mereces que te quieran y que pueda casarse contigo", explicaba el cantante, que agregaba que su madre y hermana, desde la muerte de su padre, dependían totalmente de él.

La muchacha, que posteriormente se casó con un empresario del sector inmobiliario y pasó a llamarse Delia Pule, murió el pasado fin de semana con 71 años y le dejó la carta como recuerdo a su hermano, Graham, de 65.

Delia, que creció en la ciudad de Leeds, conoció al cantante trabajando como bailarina con él y ambos estuvieron juntos año y medio.

Según reveló uno de los familiares de la muchacha, cuando los dos iban al cine juntos, el cantante quería que la madre o alguna de las hermanas los acompañasen, algo que a ella le resultó chocante.