El presidente de Castilla La Mancha, José María Barreda, se mostró hoy optimista sobre la evolución de la economía, aunque no con la "fe del carbonero", es decir, sin obviar la realidad de la situación por la que se atraviesa. Barreda hizo esta afirmación en la clausura de la Asamblea General de CEOE-CEPYME de Ciudad Real, en la que Arturo Mesa, que lleva en el cargo ocho años, fuera reelegido para un tercer mandato.

El presidente autonómico, que recordó que fue el primero en "hablar sin tapujos" de crisis económica, consideró que para hacer frente al actual momento era preciso "coger el toro por los cuernos y decir la verdad".

Aunque el ámbito de la crisis es mundial, Barreda apeló a que cada uno, en el ámbito de sus responsabilidades, "hagamos lo que corresponda para que las cosas vayan mejor". El presidente de Castilla La Mancha señaló que las "cosas van muy rápidas", que es preciso hacer un esfuerzo de todos, sin que se "pueda mirar para otro lado o cruzarse de brazos a esperar a que escampe".

Según agregó, esto debe servir, para que, cuando se acabe la crisis económica, se salga manteniendo y mejorando la "cohesión social, el tejido productivo y no se deteriore la competitividad", además de contar con mejores infraestructuras, como la del agua, y las comunicaciones.

Para Barreda, en estos momentos, Castilla La Mancha cuenta con u "intangible" que es la "confianza en saber que podemos hacer cualquier cosa que queramos hacer". En este sentido, aludió a la capacidad de acuerdo que hay en la región y los frutos que esto está dando con el pacto por el desarrollo y la competitividad y el último pacto por Castilla La Mancha.REELEGIDO

Por otro lado, Arturo Mesa, que fue reelegido por "aclamación" como presidente de CEOE-CEPYME de Ciudad Real para un tercer mandato, defendió la dotación de agua como un "elemento estratégico para el desarrollo".

Asimismo, además de mostrar su preocupación por la situación de Repsol en Puertollano, Mesa pidió el desarrollo de las infraestructuras en la provincia, no dejar que el aeropuerto de Ciudad Real "se desmorone", impulsar la continuidad de la autovía Toledo-Ciudad Real hasta Córdoba.

Resaltó también los problemas de financiación de las empresas y la morosidad que les afecta y se mostró contrario a la subida del IVA y a favor de que se tomen medidas con respecto al mercado laboral.