De la Higuera realizó estos llamamientos en el transcurso del acto contra la violencia de género celebrado esta mañana en Tábara, organizado por la Subdelegación del Gobierno y que contó con la colaboración del Ayuntamiento y de las asociaciones cívicas del municipio y de la comarca.

Esta iniciativa, que se enmarca en el Plan Autonómico de Prevención y Protección contra la Violencia de Género en el Medio Rural puesto en marcha por la Delegación del Gobierno, es la cuarta que organiza la Subdelegación del Gobierno fuera de la capital, tras las celebradas en Alcañices, Mombuey y Villalpando, y que en meses sucesivos se llevarán a otras zonas rurales.

En el acto de esta mañana, que en su primera parte discurrió en el salón de actos del Edificio del Reloj que aloja servicios municipales y el centro cultural, intervino en principio el alcalde, José Ramos San Primitivo, que agradeció a la Subdelegación del Gobierno que hubiera elegido Tábara para realizar este homenaje a las víctimas.

A continuación, en representación de las asociaciones cívicas de la zona intervinieron Flor Carro Aparicio y María de los Ángeles Vicente, y cerró el turno la subdelegada del Gobierno, Pilar de la Higuera, quien inició y concluyó su intervención con la lectura de unos versos de León Felipe.

En su alegato contra la violencia de género, Pilar de la Higuera apeló a la unidad de todas las instituciones para hacer frente "a este drama social que anula a las víctimas y las sume en un clima de temor que les impide denunciar su situación". Reiteró el llamamiento a toda la sociedad para acabar con todo tipo de agresiones y en especial contra la violencia de género, que supone uno de los mayores desprecios a la vida por la fragilidad física de las víctimas y la indefensión en la que se encuentran, especialmente en el medio rural.

Denunciar de inmediato

Asimismo, pidió para ellas y para sus hijos el "reconocimiento y la solidaridad activa" de toda la sociedad, para que noten el apoyo de los ciudadanos y se sientan protegidas —"en lo que el Gobierno está poniendo todos los esfuerzos y recursos", según dijo—, y animó a quienes sufren esta lacra a denunciar enseguida y a no callar ni dejarse dominar por el miedo.

A continuación se guardó un minuto de silencio por las víctimas y se soltaron dos palomas blancas. En el salón de actos se colocaron varias siluetas de personas, una por cada mujer fallecida este año por las agresiones machistas, con los nombres de cada una de ellas y el mismo número de velas. Se realizó también una exposición mural con opiniones y reflexiones sobre el tema, aportadas por los vecinos de la comarca.