AVACU ha detectado que en sólo uno de los establecimientos los productos no se encontraban protegidos por vitrinas expositoras, tal y como se establece en el Bando de la alcaldía mientras que en muchos de ellos, sólo algunos de los productos se encontraban debidamente resguardados.

En relación con la lista de precios, la mayoría la tienen a la vista, si bien en algunos casos el cartel era "demasiado pequeño". En tres de los puestos se debió preguntar el precio. Asimismo, la mitad de los puestos no exhibía la autorización municipal correspondiente en un lugar visible al público ni en esta misma proporción de instalaciones se observó el cartel de la disposición de hojas de reclamaciones para los consumidores.

Por otra parte, en la práctica totalidad de los puestos se venden otros productos, principalmente chocolate, pero también agua, churros o buñuelos con nata y otras bebidas. La organización destacó que si bien el precio de la media docena tanto de buñuelos como de churros se encuentra en los 2,50 euros, a medida que el puesto está situado en el centro de la ciudad el precio se llega a incrementar hasta los 3,50 euros.