En un comunicado, afirmó que "sale como cada año a la calle en rechazo de las prácticas de que es autor este Banco con sede en Euskadi".

En un comunicado, la citada plataforma aseguró que las denuncias que acumula el BBVA, se fundamentan en estudios desde diferentes instituciones, que muestran la financiación que el banco ofrece a empresas y corporaciones, "cuyas actividades vulneran los derechos humanos y son dañinas con el medioambiente".

Asimismo, aseguró que la entidad se "vanagloria de presentar un paquete de iniciativas en materia de Responsabilidad Social Corporativa, que para nada se ajusta con la realidad, y que responde más a motivaciones lucrativas y de marketing".

Asimismo, indicó que "se responsabiliza también al BBVA de financiar la guerra", por su implicación en la industria militar, a través de una "alta" participación (65,69%) en el accionariado de Rymsa, o Inmize (40%), "ambos fabricantes de material bélico y vinculado además con empresas como CESCE, que financia exportaciones de armas".

La plataforma también denunció que las políticas laborales de la entidad bancaria, "hacen aguas en diferentes puntos, desde las desigualdades en materia de género, hasta las condiciones de precarización, especialmente para trabajadores de América Latina".

Por otra parte, señaló que, según los resultados económicos de 2009, el BBVA obtuvo un beneficio de 5.260 millones de euros, en plena crisis económica internacional, "panorama que por otra parte, ha llevado al actual presidente Francisco González a declarar que la situación exige el esfuerzo, el sacrificio y la implicación de todos".

La plataforma manifestó que las diferencias salariales "abren una brecha que dejan en evidencia sus palabras". "El mismo, percibió un salario total de 5,32 millones de euros en 2009, el anterior consejero delegado de BBVA, José Ignacio Goirigolzarri, dejó el banco percibiendo una pensión vitalicia de 3 millones de euros anuales, mientras que el actual presidente del BBVA, González, recibirá por su jubilación una pensión de casi 80 millones de euros", agregó.

La citada plataforma manifestó que ese dinero "está manchado de sangre, porque proviene de la financiación de la fábricación de armas", y está "contaminado, porque envenena y destruye los ecosistemas a través de los proyectos que avala".