La presidenta de Amnistía Animal, Matilde Cubillo, comentó que "el pasado 14 de octubre, el Centro Asistencial Veterinario Surbatán recibió la llamada de un hombre que admitió haber apuñalado a su perro y que dijo que el animal se encontraba mal".

Esta clínica envió la ambulancia "SEVEMUR" para poder asistir al perro en el propio domicilio, "y, de nuevo, el propietario admitió haber apuñalado al perro porque según él, lo había mordido", añadió Cubillo.

Una vez trasladado el animal al centro veterinario, se pudo comprobar que le habían asestado hasta diez puñaladas, por lo que se procedió a operarle para salvarle la vida. Por su parte, el propietario ha renunciado al animal, y en estos momentos se recupera en una sociedad protectora de animales.

"Amnistía Animal se personará como acusación particular en este caso, ya que está tipificado como delito en el Código Penal, y solicitará para el propietario del perro la pena máxima: un año de cárcel", concluyó esta presidenta.