Uno de cada tres zaragozanos mayores de 25 años es hipertenso —el 37 por ciento del total—, lo que supone que tienen cifras de presión arterial iguales o superiores a 140/90 milímetros de mercurio (mmHg), que les predispone a padecer ciertas enfermedades cardiacas.

Así se deriva del 'Estudio Zaragoza', que ha analizado los hábitos alimenticios y conductas de riesgo asociadas a enfermedades cardiovasculares de más de 6.000 zaragozanos a lo largo de cinco años.

Las conclusiones principales del estudio se presentaron hoy en rueda de prensa en el marco de la 15ª Reunión Nacional de la Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA), que se celebra en el Palacio de Congresos de la capital aragonesa hasta el próximo viernes, 12 de marzo.

El coordinador del estudio y presidente del Comité Organizador de esta reunión, Pedro Cía, explicó que la hipertensión fomenta el desarrollo de ciertas patologías cardiacas, como la angina de pecho.

Entre las causas del aumento del número de personas con tensión alta, Cía destacó que un 77 por ciento de los hipertensos consultados eran sedentarios, lo que predispone a la hipertensión. Además, el sobrepeso también favorece una elevada presión arterial, agregó.

Cía animó a la población a "practicar actividad física de forma cotidiana" y propuso, entre otros hábitos, "caminar durante tres cuartos de hora al día, ir al trabajo andando o bajarse antes del autobús".

De acuerdo con los resultados del 'Estudio Zaragoza', se calcula que cerca del 11 por ciento de los zaragozanos es diabético y que el 47 por ciento tiene cifras de colesterol por encima de 160 miligramos por decilitro. El tabaquismo es otra conducta de riesgo muy presente en los habitantes de la capital aragonesa, ya que afecta al 34 por ciento de los hombres y al 13 por ciento de las mujeres encuestadas.

"epidemia potencialmente evitable"

Cerca de 4.000 asistentes se reúnen estos días en el Palacio de Congresos de Zaragoza para abordar cuestiones relativas a la hipertensión y, más concretamente, a la prevención del riesgo vascular.

Algunos de los problemas que analizarán estos profesionales son "entender que la hipertensión no va aislada, convencer al país de que lo que realmente mata son las enfermedades cardiovasculares e incidir en la importancia del diagnóstico precoz", resumió el presidente electo de la SEH-LELHA, el doctor Álex Roca-Cusachs.

"Estamos aquí para hablar de un problema capital de la sociedad española", aseveró el presidente de la SEH-LELHA, Pedro Aranda, al tiempo que agregó que la hipertensión es "muy prevalente", ya que un 35 por ciento de la población adulta tiene una presión arterial elevada.

A su juicio, esto se debe a "la adopción de estilos de vida poco saludables, a la falta de ejercicio físico o al abundante consumo de sal", entre otros factores, lo que ocasiona que "hoy sea habitual ver a hipertensos de menos de 20 años".

Además, incidió en que "se ha progresado" en el control del hipertenso, pero todavía es "alto" el porcentaje de pacientes que siguen sin ser controlados. Por ello, reclamó a las autoridades sanitarias "que lideren la acción y la puesta en marcha de planes de concienciación".

Para Roca-Cusachs, la hipertensión es "una epidemia potencialmente evitable" porque "no es una maldición de la edad sino de los hábitos de vida de la sociedad actual". Así, insistió en que si se sigue un estilo de vida adecuado "no es imposible" evitar la tensión alta.

Otros factores de riesgo

La hipertensión arterial se presenta aislada en un porcentaje muy bajo de los casos. Por lo general, esta patología mantiene una relación muy estrecha con otros factores de riesgo como la obesidad, la diabetes, el síndrome metabólico o la dislipemia. "Cuando se es hipertenso, se es algo más", alertó Roca-Cusachs.

De hecho, en los pacientes hipertensos de más de 45 años, el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares es mayor conforme presentan niveles altos de colesterol y glucemia, sobrepeso y son fumadores habituales.

Según indicó Roca-Cusachs, "un 70 por ciento de los pacientes saben que son hipertensos, pero empiezan a tratarse y luego lo dejan". Aproximadamente la mitad de las personas con tensión alta abandona el tratamiento terapéutico durante el primer año y el 85 por ciento incumple las medidas higiénico-dietéticas que recomiendan los especialistas.

Las razones que explican este comportamiento son, entre otras, "negar la evidencia o dejar los medicamentos", dijo Roca-Cusachs. A su juicio, para mejorar el cumplimiento del tratamiento, se debe tratar de "convencer al paciente dándole información y datos objetivos y de romper la inercia terapéutica actual".

A este respecto, comentó que "el personal sanitario debe dar un paso más y utilizar todos los medios a su alcance para corregir las cifras de presión arterial".

Los tres ponentes también advirtieron acerca del aumento de la incidencia de la hipertensión entre la población joven. Según señaló Pedro Aranda, entre un 4 y un 5 por ciento de los jóvenes entre 15 y 35 años son hipertensos y entre un 5 y un 10 por ciento se encuentra en los límites de la pre-hipertensión.