Los sindicatos LAB, ELA, HIRU, EHNE y STEE-EILAS, se manifestaron hoy de manera conjunta por las calles de Bilbao, San Sebastián, Vitoria y Pamplona coincidiendo con la celebración del Día Internacional de la Mujer, para exigir unas condiciones de vida y trabajo "dignas" para las mujeres, colectivo "especialmente afectado por la crisis, así como por las medidas que para afrontarla se están llevando a cabo" como la reforma laboral o la del sistema de pensiones.

En San Sebastián, la marcha, en la que tomaron parte varios centenares de personas, partió a las 12.00 horas del Boulevard bajo el lema 'Prekarietatearen aurrean. Emakumeok eredu berri bat. Reformas: más precariedad y pobreza'. A continuación, recorrieron las principales calles del centro de la ciudad y concluyeron con la lectura de un manifiesto, de nuevo en el Boulevard.

Por otro lado en Bilbao la marcha salió de la plaza elíptica y contó, entre otros, con la presencia del secretario general de ELA, Txiki Muñoz, y de la secretaria general adjunta del sindicato, Amaia Muñoa, quien denunció la "precariedad" de la mujer en el trabajo y advirtió que con la reforma laboral esta situación "puede empeorar".

En la capital guipuzcoana, en declaraciones a los medios informativos, Mari Carmen Urteaga, responsable del área de la mujer de LAB en Gipuzkoa, denunció los efectos que la crisis está teniendo en las mujeres, así como el de las medidas que para hacer frente a esta coyuntura se están adoptando, como "dar dinero a los bancos, que algunos se lo están gastando para jubilaciones de oro, o rebajar el gasto social que va a cubrir todos esos espacios de trabajo que típicamente ocupan las mujeres, como el cuidado de niños o ancianos".

A su juicio, "con esta rebaja en los presupuestos" en materia social, "va a recaer un mayor peso de todo este trabajo no pagado y no cobrado sobre las espaldas de las mujeres". Además, censuró "que la reforma laboral y el 'pensionazo' van a ahondar en las condiciones laborales de las mujeres".

Urteaga insistió en que "el 'pensionazo' que supone un ataque a toda la clase trabajadora va a tener repercusiones más graves en el caso de la mujer" porque son ellas quienes "han estado mayor tiempo sin cotizar, es decir, bien porque hayan estado más tiempo en el paro, porque hayan tardado más en trabajar o porque hayan cogido excedencias para cuidar de sus familiares o sus contratos son mayoritariamente a tiempo parcial".

"Lo mismo ocurre con la reforma laboral, mala para todos, y que va a ahondar todavía más en el contrato a tiempo parcial, que afecta a de cada 10 personas a ocho mujeres" y que va a "desregular aún más la situación" al permitir la creación, además del contrato a tiempo parcial fijo, de otro "cuando al empresario le venga bien y varias veces al día". La sindicalista indicó que con estas medidas "es imposible conciliar la vida laboral y familiar y vivir una vida digna".

A ello añadió que "la OIT ya ha avisado de que en crisis anteriores se han cebado más en la industria o la construcción pero a medida que han avanzado se ha ido perjudicando más y más a la situación de las mujeres en el mundo laboral y eso es lo que viene", no obstante, manifestó cierto "optimismo" en la medida en que los sindicatos van a "estar aquí para luchar y hacer frente" a esta situación.

Salir a la calle

Por su parte, Laura González de Txabarri de ELA incidió en que las medidas que se están llevando a cabo para salir de esta coyuntura económica van "en contra de la dirección en que tendrían que ir", ya que "perjudican doblemente a las mujeres, tanto desde el punto de vista laboral como desde el de creación de más pobreza y mayor dependencia en materia de pensiones".

Finalmente, Africa Jiménez del sindicato STEE-EILAS destacó que "la crisis no la han creado los trabajadores y, sin embargo, son éstos, especialmente las mujeres, quienes la están pagando". En este contexto denunció que las mujeres "siguen cobrando menos que los hombres y en estos momentos de crisis son los sectores feminizados los más precarios de la sociedad". Frente a ello destacó la importancia de que las mujeres "salgan a la calle" porque en estos momentos de crisis se les "tiene que ver".