El jefe de la Policía Judicial de Sevilla aseguró hoy que el ex responsable del Área de Vía Pública del Ayuntamiento sevillano y ex asesor del Grupo Municipal Socialista Domingo Enrique Castaño "ideó un concurso con un resultado predeterminado para que lo ganara una licitadora concreta", todo ello dentro de la investigación por la supuesta venta irregular de los suelos del merca a Sanma —filial de Sando— a pesar de contar con una oferta superior del Grupo Noga.

En su declaración como testigo ante el Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla, a la que ha tenido acceso Europa Press, el jefe de la Policía Judicial aseguró que "el mecanismo que se utilizó fue eliminar mediante determinada cláusula ofertas que estaban por encima de la de Sanma y primar una circunstancia que solamente la reunía ésta última", considerando "decisiva" la participación de los técnicos José Antonio Ripollés y María Victoria Bustamante en la elaboración del pliego de condiciones y en el informe de valoración.

Así, concretó que, en la elaboración del pliego "siguieron instrucciones" de Castaño, todo ello "avalado" por el vicesecretario del consejo de administración y de la comisión ejecutiva de Mercasevilla, Jorge Piñero, añadiendo además, sobre la participación del que fuera director general del merca, Fernando Mellet, que "no tiene ni capacidad jurídica ni técnica para la elaboración de los informes o pliegos", aunque como gerente del merca "ha sido el impulsor del concurso predeterminado para que lo ganara Sanma".

De este modo, el jefe de la Policía Judicial de Sevilla puso de manifiesto que, con el pliego de condiciones que se realiza, "se trata de encubrir la adjudicación directa" a favor de Sanma, "ya que se realiza dicho pliego de condiciones en base a un híbrido de diferentes pliegos de diferentes organismos para que de un resultado determinado, y es que el concurso se lo adjudique finalmente dicha entidad".

La limitación al alza "se ocultó" a la comisión ejecutiva

Además, indicó que el pliego se fue elaborando en distintas fases, por lo que en el borrador que se envió a Mercasa "no existe la cláusula de limitación al alza", añadiendo que "ni siquiera en el que se aprueba el día 8 de noviembre de 2005 existe la mencionada cláusula, con lo cual se ocultó a los integrantes de la Comisión Ejecutiva la cláusula que encubría la adjudicación directa a Sanma".

En esta línea, precisó que en la reunión de la Comisión Ejecutiva del 8 de noviembre "se aporta un pliego de condiciones —"encargado" por Castaño a Bustamante, entre los cuales hay un "trasvase" de información a través de correos electrónicos— incompleto, con lo cual existió ocultación", al tiempo que dijo que, en esta fase de la investigación, "aún se ignora quién es el ideólogo de la cláusula de limitación al alza, ya que Bustamante negó que fuera ella y Ripollés manifestó además que no la compartía en absoluto".

Además, desveló que el director general del Grupo Noga "le manifestó que ellos querían llevarse el concurso, que efectivamente habían sufrido un perjuicio, pero que no iban a reclamar porque tenían otros intereses en Sevilla", e incidió en que, del conjunto de toda la investigación, "se deduce que Castaño es el que da las instrucciones, no solo a Bustamante, sino también a Piñero y a Ripollés, ya que el pliego no se elabora por parcelas sino en conjunto".

Volviendo al papel desempeñado por Ripollés, aseguró que "es el técnico, el economista, que convierte en números la idea general del concurso predeterminado para que lo ganara Sanma", y sobre el pliego de condiciones dijo que este técnico "se limitó a dar el precio de salida a la opción de compra, de la compraventa y de la revalorización de la tasación".