El vicecónsul rumano traslada al Ayuntamiento de Santa Marta inquietudes sobre situación del colectivo en la localidad

El vicecónsul rumano Catalin Gelu Boicu se reunió ayer con representantes del Ayuntamiento de Santa Marta para intercambiar puntos de vista e iniciativas con respecto a la situación de los ciudadanos rumanos en dicha localidad pacense.

Con motivo de la llegada de los estudiantes de Cluj Napoca, centro cultural de Rumanía, el vicecónsul rumano Catalin Boicu visitó Santa Marta desde Ciudad Real para darles la bienvenida a España.

Asimismo, aprovechó la ocasión para reunirse con el Ayuntamiento de Santa Marta y trasladarle sus inquietudes con respecto a las condiciones en las que se encuentran los rumanos en el país.

Junto al concejal de Santa Marta y profesor del IES 'Sierra la Calera', Alfredo Aragüete, reocorrió las instalaciones del centro docente y del ayuntamiento, donde lugar la reunión, que contó con la presencia del concejal de Turismo, Jaime Sanabria, y del secretario Jesús Nieto.

El vicecónsul se interesó, según informó el consistorio de Santa Marta en nota de prensa, por el número de rumanos que viven en el pueblo, que asciende a 128. Los concejales le mostraron "todo" su apoyo a las iniciativas que emprenda Rumanía con respecto a la regularización de la situación laboral y vital de los rumanos, ya que según expresó Alfredo Aragüete, "deben tener las mismas condiciones de trabajo que los españoles, ya que si permiten el fraude, ellos son las principales víctimas del mismo".

En la reunión se apuntó que el Ayuntamiento de Santa Marta "se preocupa" por las condiciones de vida de estos ciudadanos. Este interés se manifiesta en las visitas que realiza la Policía local a sus domicilios y en la atención que ofrece el Servicio Social de Base. Además, en el encuentro se resaltó la labor de la Mancomunidad de Zona de Barros, integrada por nueve municipios y que tiene su presidencia en Santa Marta.

En ella se tratan los problemas acarreados por la inmigración y las posibles soluciones que se pueden utilizar para subsanarlos. Además, echaron la vista atrás e informaron al vicecónsul sobre los eventos que se produjeron hace dos años, cuando llegaron a la localidad alrededor de 2000 rumanos.

El Ayuntamiento de Santa Marta mostró también una "clara voluntad" de colaboración con el vicecónsul para mejorar la vida de los rumanos en la región, y puso el acento en la necesidad de crear un foro a un nivel "más alto que el local" en el que se traten estos asuntos, debido a que "es de vital importancia para la corporación que se erradique la discriminación y que se genere un clima de convivencia alejado de los conflictos y los fraudes", añadió el consistorio.

Asimismo, el ayuntamiento propuso al vicecónsul la posibilidad de que se lleve a cabo una campaña de concienciación en Rumanía sobre lo que deben exigir como mínimos para trabajar en el extranjero, esto es, que conozcan sus derechos y sus deberes en el marco internacional.

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