El director de la Oficina del Metro de Málaga, Enrique Salvo Tierra, destacó la necesidad de trabajar desde ya para que la gente se vaya familiarizando con el suburbano, que conllevará "un salto cualitativo" para la ciudad y que aportará "un valor añadido" a su oferta.

Aunque indicó que, "en general, la gente sabe que se está haciendo un metro en Málaga", reconoció a Europa Press que "todavía es algo muy distante", por lo que subrayó la necesidad de "volvernos mucho más próximos" desde las administraciones.

Según explicó, "hay que llevar a cabo un programa de educación, de generación de la cultura del metro, con cuestiones como saber que en las escaleras mecánicas hay que situarse a la derecha para permitir el paso o dónde está cada estación para que los ciudadanos puedan hacerse su propio esquema mental". De hecho, informó de que se van a ubicar ya grandes paneles en las obras de esas paradas, con el objetivo de que "la gente se vaya habituando".

Precisamente, señaló que su objetivo es que los malagueños controlen el plano de las dos primeras líneas de este medio de transporte y para eso "hay que ir trabajando ya". Al respecto, destacó la importancia de "calar bien en la gente joven y en los niños porque ellos van a ser los verdaderos colonizadores del metro".

Comercio y turismo

Como declaró, el metro será "una gran arteria", pero "a partir de él se abrirán microcapilares, sobre todo en el entorno de las estaciones", un aspecto que, a su juicio, hay que saber aprovechar para "generar rutas comerciales, de restauración, culturales, etcétera".

Así, Salvo hizo hincapié en que el suburbano conllevará "un salto cualitativo" desde el punto de vista turístico, algo que "tenemos que aprovechar" y en lo que "debemos trabajar ya desde este año". "No hay que preocuparse sólo de la obra, sino de todos los valores que tendrá el metro", apostilló.

En este sentido, expuso que el intercambiador central de calle Mendívil permitirá que "la gente que se baje del AVE pueda coger ahí mismo el metro y en dos minutos estar en el Martín Carpena, por ejemplo".

Cambio de mentalidad

Por otra parte, resaltó el cambio de mentalidad que se ha producido en este tiempo entre los malagueños en relación con el metro, habiendo pasado de una primera fase en la que se preguntaban "por qué nos colocan esto aquí" a "cuándo vais a terminar", que es lo que ocurre ya en calle La Unión, y a "cuándo va a empezar a funcionar", en el caso de Carretera de Cádiz. Incluso, añadió, hay una cuarta etapa que también están empezando a detectar en puntos de la ciudad como Bailén-Miraflores o El Palo: "¿cuándo va a llegar a mi barrio?".

El responsable del metro en Málaga, que pidió disculpas a los ciudadanos por los "inconvenientes" que una obra de estas características genera, valoró el "apoyo" de los trabajadores del Ayuntamiento, sobre todo del Área de Tráfico, de Comercio y de la Policía Local.

En cuanto a su relación con los representantes políticos del Consistorio, especialmente con el alcalde, Francisco de la Torre, aseguró que "el nivel de interlocución es alto y bueno, con el objetivo de dar una respuesta de forma inmediata a las demandas de los ciudadanos".

Aplaudió que, especialmente en esta última etapa, esta infraestructura, que "supondrá un paso a la modernidad, no se haya situado en un rifirrafe político", y confió en que continúe así pese a la cercanía de las elecciones municipales de 2011, de modo que "no se usen armas de paralización de obras o cuestiones que puedan afectar al ritmo de los trabajos".

El objetivo es la puesta en servicio a finales de 2011 de la línea 2 (Héroe de Sostoa-Martín Carpena) y el tramo en superficie de la 1 que atraviesa el campus universitario de Teatinos. Asimismo, la previsión es, según Salvo, que "la V que va desde el Palacio de Deportes hasta el río Guadalmedina y luego a los talleres esté terminada a lo largo de 2013". A partir de ese momento, se estima movilizar anualmente a unos 17 millones de pasajeros.