La CIG-Metal ha denunciado ante la Inspección de Trabajo que los astilleros se han negado a autorizarles a celebrar asambleas de trabajadores para informar de la actual situación del sector naval en la provincia de Pontevedra y del acuerdo sobre la desaparición de la bolsa de empleo —firmado por patronal y los sindicatos CC.OO. y UGT—.

El sindicato nacionalista explicó, en un comunicado, que hoy comenzaba la tanda de asambleas que habían programado en centros de trabajo del naval, siendo la primera en el astillero vigués de Vulcano. Sin embargo, denunció la "postura unánime" de los astilleros, que responden por escrito a la solicitud de hacer asambleas en la hora del bocadillo diciendo que la central "no está legitimada como sindicato", puesto que las convocatorias "deben estar respaldadas por el 33 por ciento de los delegados del personal de la industria auxiliar o de los comités de las empresas principales".

Para la CIG, esta negativa es "una falta de respeto a la representación sindical", sobre todo cuando es la Confederación Intersindical Galega es la formación mayoritaria en la industria auxiliar. Así, ha puesto los hechos en conocimiento de la Inspección, estimando que se trata de un caso de "vulneración de libertad sindical".

En todo caso, la CIG-Metal anunció que, "pese a las tentativas de impedimento", la próxima semana se realizarán asambleas en el resto de astilleros, "aunque tenga que ser por encima del portalón".

En los encuentros denunciará que la patronal quiere "imponer" una bolsa bianual de 200 horas y analizará la posibilidad de convocar "una importante movilización la segunda semana de marzo en defensa del empleo y por la regulación de la contratación" en el sector.