Además, tal y como defendió durante el pleno el alcalde, Francisco de la Torre, se demandará al Gobierno andaluz que realice las inversiones necesarias para interconectar todos los embalses, de manera que los excedentes de la zona occidental, donde, estadísticamente, las precipitaciones son más abundantes, puedan ser transportados a la parte central y oriental de la provincia y no se tiren al mar.

En este sentido, De la Torre, que resaltó el esfuerzo municipal para reducir el consumo y para aumentar la calidad del agua, teniendo una "fresquita y deliciosa", hizo hincapié en que de un periodo de sequía se ha pasado a que los embalses de la provincia estén al límite de su capacidad, lo que supone tener que abrir las compuertas, una vez que superan los niveles de seguridad, para la expulsión del agua recibida por las lluvias y por los ríos.

Según subrayó, pantanos como la Concepción, Guadalhorce, Casasola o Limonero verterán al río y, por tanto, al mar, unos caudales de agua que van desde los 30 metros cúbicos por segundo a los 120. A su juicio, es necesario que, "en zonas geográficas condenadas a soportar periodos de sequía, se ejecuten urgentemente las inversiones en infraestructuras necesarias para optimizar al máximo el agua caída por la lluvia, garantizando como mínimo una reserva de tres años de consumo, tanto urbano como agrícola". Además, "se evitarían los lamentables efectos de las inundaciones que conlleva la falta de regulación".

Aunque reconoció que aumentar la capacidad de almacenamiento de agua conllevaría "un esfuerzo considerable" por parte de la Administración competente, destacó que, "a medio plazo, la inversión en estas infraestructuras sería mucho más rentable, económica y ambientalmente, que la precisa para la propuesta de desalación", que implica "un elevado coste energético de explotación y una contaminación importante por los residuos y vertidos que genera".

Psoe e iu

La concejala socialista Begoña Medina justificó el voto negativo de su grupo aludiendo a que la propuesta del PP supone "ir en contra de la Directiva Marco Europea del Agua, que aboga por una mejor gestión de los recursos y no por el incremento de los pantanos". Además, afirmó que "los embalses no necesitan ser recrecidos porque tienen suficiente capacidad para atender la demanda de la provincia".

Asimismo, aseguró que, según la Agencia Andaluza del Agua, las conexiones entre los distintos pantanos de la provincia ya están ejecutadas. Al respecto, advirtió al Ayuntamiento de que existen en la ciudad conducciones en las que van juntas las aguas pluviales y las de saneamiento, "algo que debería resolverse".

Por su parte, el portavoz de IU, Pedro Moreno Brenes, rechazó la propuesta del PP porque "implica hacer más pantanos y transvases", cuando, a su juicio, "existen otras medidas para optimizar los recursos, que no pasan por la política de construcción de embalses". Abogó así por "una actuación racional y lógica medioambientalmente".