En declaraciones a Europa Press, García-Palacios puntualizó que "da igual" el número de contrataciones en origen que se establezca para el cupo de reserva, indicando que "lo importante", es que los empresarios agrícolas cuenten con la mano de obra "precisa" para realizar la recolección ya que "la fresa y la frambuesa son frutos que deben ser recogidos en un plazo de días y necesitan agilidad".

En este sentido, solicitó a las administraciones que pongan en marcha "todos los recursos que sean necesarios" debido a que "las cosechas no entienden de plazos administrativos sino que tienen sus propios tiempos", y en consecuencia el presidente de Asaja abogó porque las administraciones "sean flexibles y no cierren las cifras".

Asimismo, García-Palacios señaló que los empresarios agrícolas son "colaboradores necesarios para aminorar el desempleo, pero esta colaboración no puede afectar a su rentabilidad".

Por ello, hizo hincapié en que "hay que contar con las necesidades de los empresarios y con las de los trabajadores y en el transcurso de la campaña se verá si son necesarios 3.000 inmigrantes de reserva, menos, más, o ninguno, según como se desarrolle".

Además, recordó que la prioridad de los trabajadores locales para la campaña "no es una novedad" debido a la actual situación económica y "se viene dando desde 2008", añadió.

Por otro lado, el presidente de Asaja-Huelva recordó que debido a las condiciones climatológicas las pérdidas en todos los cultivos, —fresa, frambuesa o cereal, entre otros— son "diarias, numerosas e irrecuperables" debido al temporal, y a que los empresarios agrícolas "no disponen de seguros que den cobertura ante estas catástrofes".