Asimismo, comentó que estas subvenciones permiten llevar a cabo una reorganización y diversificación de la oferta citrícola para estabilizar el mercado, introduciendo nuevas variedades de cítricos que permitan prorrogar la temporada.

En este sentido, el objetivo del Plan de Reconversión Varietal es conseguir desplazar la producción de diciembre y comienzos de enero hacia el final de la campaña para paliar el déficit de producto con el que se encuentra la citricultura valenciana en los últimos meses del ejercicio y poder abastecer a los mercados exteriores en buenas condiciones, tanto en volumen de oferta como en calidad de la misma, precisó la Generalitat.

De este modo, agregó, se persigue fortalecer la competitividad del sector citrícola valenciano y, en última instancia, mejorar las rentas de los agricultores. Con el fin de garantizar la eficacia de esta medida, las plantaciones que se pueden acoger deberán reunir unos requisitos de superficie —entre 0,3 y 18 hectáreas— y una densidad arbórea específica, en función del cultivo.

Las actividades subvencionables serán el arranque y la nueva plantación de variedades citrícolas, el injertado sobre patrones ya existentes en la plantación, la mejora de las instalaciones de riego en las parcelas que ya estuvieran cultivadas en regadío y, como novedad de esta nueva convocatoria de ayudas, el reinjertado de la plantación.

La subvención será de mínimo el 30 por ciento de la inversión a realizar, aunque se puede incrementar un 10 por ciento en el caso de agricultor profesional; un 10 por ciento en el caso de agricultor joven; un 5 por ciento en el caso de que el beneficiario radique en una zona clasificada como desfavorecida y un 5 por ciento si es socio de una OPFH, llegando al 60 por ciento de la inversión, comentó la administración autonómica.