En un comunicado, Lobo explicó que la actitud y declaraciones de ambos dirigentes de los últimos días "denota el claro nerviosismo de ambos y su imperiosa necesidad de separarse de un Partido Socialista que está de capa caída en toda España", aunque aclaró "los ciudadanos de Las Palmas de Gran Canaria y del resto de la Isla no son tontos y saben perfectamente que mucho de los males de Gran Canaria derivan de la mala gestión de PSOE, Nueva Canarias y Compromiso".

De esta manera, criticó "el oportunismo político de Barrios y Rodríguez" y les animó "a abandonar sus pactos en Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y Cabildo insular si realmente no creen en sus socios de Gobierno en lugar de ponerlos verdes cada vez que tienen ocasión en los medios de comunicación y en otros foros".

El presidente de CC aclaró que "probablemente es muy fácil para Román Rodríguez y Nardy Barrios demonizar a un Partido Socialista no muy bien situado en las encuestas" pero les recordó que "es el mismo Partido Socialista con el que Rodríguez traicionó a los canarios en el Congreso de los Diputados, cuando se convirtió en tránsfuga de Coalición Canaria; es el mismo partido con el que pactó hace casi 3 años, y es el mismo Partido Socialista que junto a Nueva Canarias y Compromiso han paralizado prácticamente a la ciudad y a Gran Canaria, convirtiéndola en una de las islas más afectadas por la crisis económica y con mayor tasa de paro".

Por otra parte, Lobo lamentó que el vicepresidente del Cabildo, Román Rodríguez, "siga anclado en avivar el pleito insular y lance mensajes sobre la aportación del Ejecutivo canario a las obras de carretera de Tejeda sin ni siquiera contrastarlos, ya que, en sus propias palabras y tras el titular de siempre, sobre que el Ejecutivo beneficia a Tenerife deja caer un 'si eso fuera así', que demuestra que ni siquiera se ha molestado en confirmarlo".

"Es una pena —finalizó— que en lugar de hacer su trabajo como vicepresidente del Cabildo y responsable de las áreas de Obras Públicas e Infraestructuras centre su gestión en la polémica, la crítica fácil y el engaño a los ciudadanos de Gran Canaria", reprochándole que "siga intentando ganar votos a cambio de un pleito insular que está solo en su imaginación y en su afán por dar continuidad a su proyecto político".