La escuela infantil realizará una intervención temprana en relación a las necesidades que presentan los menores de 0 a 3 años con algún trastorno del desarrollo o que están en situación de alto riesgo biológico o psicológico, para posibilitar así su integración en contextos y recursos normalizados.

Las 30 plazas de la escuela también servirán para apoyar a las familias con la formación e información que precisen para ayudar en las mejores condiciones a la recuperación de sus hijos, facilitando la normalización y conciliación de su vida familiar, social y laboral.

El coste ha sido de alrededor de 4 millones de euros y la obra se ha llevado a cabo durante un total de 8 meses, iniciativa financiada por el Cabildo de Gran Canaria, el Ministerio de Asuntos Sociales, la Dirección General de Tributos del Gobierno de Canarias y el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, además de empresas y particulares.

Asimismo, la residencia de menores quiere dar respuesta a los jóvenes con necesidades de intervención especializada y medidas de protección que presenten los menores de hasta 17 años, con el fin de posibilitar su integración en contextos y recursos normalizados. Para esta actividad se cuenta con 30 plazas.

El hermano provincial de la Orden Hospitalaria Ciudad San Juan de Dios, José Luis Muñoz, opinó que la inauguración del día de hoy es un reto importante después del sueño que tuvieron de poder llevar a cabo la obra.

"La creación de esta escuela infantil supone que vamos a dar respuesta a muchísimos niños que lo están demandando, sobre todo porque, desde que nacen, están marcados por la limitación, el problema y la dificultad. Aquí encontrarán espacios, personas, profesionales, medios, y los padres que tendrán la tranquilidad de poder tener respuesta cuando tienen un niño con problemas", dijo.

Por su parte, el vicepresidente y consejero de Economía y Hacienda del Gobierno de Canarias, José Manuel Soria, consideró "muy importante" tanto la escuela infantil como la residencia de menores de hasta 17 años que se inaugura hoy por la función que van a cumplir.

"Los menores de 0 a 3 años que vienen aquí van a poder integrarse luego en un proceso normal de escolarización después de recibir las terapias y las atenciones que aquí reciben", dijo.

Además, el presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Pérez, afirmó que es "un día grande" para Las Palmas de Gran Canaria. "Se ha puesto en marcha un auténtico sueño, era muy difícil llevar a cabo en un tiempo muy complicado", manifestó.

"Lo más importante —continuó— son los niños que están aquí trabajando día a día. Cada actuación, acción, movimiento o idea que expresan en esta tarea es un resultado muy visible, equivalente a cualquier logro académico en cualquier centro educativo".