Barberá dice que El Cabanyal será "un símbolo de la autonomía valenciana" frente al "sectarismo" del Gobierno

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, aseguró hoy que el barrio de El Cabanyal se "va a convertir en el símbolo de la autonomía valenciana", frente a las "injerencias y abusos de poder" de un Gobierno central "sectario, que actúa de manera diferente, según le conviene".

La primera edil se pronunció en estos términos, a preguntas de los periodistas, durante su visita a la Plaza de la Moda, instalada con motivo de la VIII Semana de la Moda de Valencia. Barberá se refirió de esta manera a la decisión adoptada por el Consell de solicitar un pleno extraordinario de las Corts y una reunión de la Comisión Bilateral del Estado y comunidades autónomas para debatir sobre el recurso de inconstitucionalidad que prevé interponer el Ejecutivo socialista contra el Decreto-Ley del Consell sobre El Cabanyal.

En este sentido, Barberá consideró que es "normal" que la Generalitat haya tomado esta decisión, tras el acuerdo alcanzado ayer por el Consejo de Ministros para interponer un recurso de inconstitucionalidad contra el Decreto-Ley aprobado por el Gobierno valenciano que declara que el Plan Especial de Protección y Reforma (PEPRI) de El Cabanyal no perjudica, daña o deteriora la protección del conjunto histórico de la ciudad de Valencia.

"Es normal que la Generalitat haga una comunicación a las Corts, porque ese decreto está validado ya por las Cámara autonómica, y lógicamente, lo que tiene que hacer el Consell es dar una comunicación a la Cámara autonómica de que el Gobierno se ha saltado el respeto, el fuero, y la consideración a las competencias de la Comunitat valenciana", manifestó la primera edil. A su juicio, este acuerdo del Ejecutivo central "lo tiene que saber el pueblo soberano, cuya representación está en las Cortes", recordó.

Asimismo, la alcaldesa manifestó que es necesario "defender el fuero" de la Comunitat, además de El Cabanyal, y que el Gobierno central "respete las competencias de autogobierno y autonomía de la Generalitat". Por ello, consideró que el caso de este barrio "se va a convertir, nada más y menos, que en el símbolo de la autonomía valenciana".

Barberá subrayó que apoyará "la defensa de este símbolo de autogobierno" y que denunciará "todos los días, y en cuanto tenga la oportunidad, que este Gobierno sectario, que preside José Luis Rodríguez Zapatero, actúa de manera diferente según le conviene a él, o según gobiernan ellos o gobernien otros, y eso no se puede consentir".

Del mismo modo, acusó a la vicepresidenta del Gobierno —quien, según recordó, "es diputada de aquí"— y a la portavoz del grupo municipal socialista del Ayuntamiento de Valencia, Carmen Alborch, de estar "a las órdenes" y "al servicio" de Salvem El Cabanyal, que calificó como "el grupo más radical y más ajeno a los vecinos de El Cabanyal".

"problemas de respeto a la generalitat"

Para la primera edil, "el Gobierno de España está permanentemente atacando a la Comunitat y esto ya no es una manera de hablar", incidió. Así, resaltó que "no hay más que pensar en el agua" e instó a los ciudadanos a fijares sobe "cuántas veces a lo largo de estos años ha habido problemas de respeto a la representación de la Generalitat cuando hay actos importantes".

Al respecto, lamentó que "cuando ha venido la vicepresidenta a Valencia, siempre ha chocado con problemas de representación o con problemas de protagonismo", con el presidente de la Generalitat, Francisco Camps. "No se deja hablar al presidente de la Generalitat en el día de la Constitución, no se deja hablar a la Generalitat, se imponen lugares o se excluye al presidente", censuró Barberá.

Sin embargo, señaló que "esto no tendría más importancia si no fuera porque lo que se ha atacado ahora es el fuero, el derecho a la autonomía valenciana, el autogobierno, la capacidad de autogobierno y las competencias que permiten y otorga la Constitución a la Comunitat, en función del estado de las autonomías".

La alcaldesa hizo hincapié en que esto "hay que respetarlo por encima de todo" y criticó que el Gobierno, "no lo respeta donde no gobierna". En este sentido, resaltó "la cantidad de privilegios que tiene Cataluña respecto a la Comunitat y respecto a otras autonomías".

Al respecto, afirmó que el Ejecutivo trata a esta autonomía "con una alfombra roja", y "hasta quiere hasta que sea nación". Así, aseveró que el Gobierno "asume de manera increíble que lo que Cataluña quiere es un trato de bilateralidad con el resto de España", mientras que, en la Comunitat, "merman la capacidad de autogobierno", lamentó.

"Es una invasión, un ataque, una injerencia, un abuso de poder. Eso es lo que hace permanentemente el Gobierno con las competencias locales y autonómicas, meterse en temas que no tiene nada que ver, e incluso, defendiendo la existencia de expolio cuando no la hay", concluyó la primera edil.

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