La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, aseveró hoy que "pase lo que pase o dicte lo que dicte la sentencia" del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana "la posibilidad de instalación de Ikea —en Alicante— es exactamente la misma", al tiempo que criticó que municipios socialistas alicantinos como Mutxamel, Sant Joan d'Alacant o Benidorm se postularan para acoger el proyecto de la multinacional sueca, tal cual estaba, pese a las críticas al proyecto del PSPV en Alicante.

Sonia Castedo hizo estas declaraciones durante el pleno ordinario de enero, en el que se aprobó la exposición pública de la modificación puntual número 31 del vigente Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), para la instalación del centro comercial en el Plan Parcial de Rabassa.

En este sentido, ante las críticas de los socialistas, que acusaban a Castedo de impedir la instalación de Ikea al empeñarse en que su emplazamiento fuera Rabassa, la alcaldesa desmintió este extremo y aseguró que es la mercantil la que está interesada en esa ubicación.

"Ustedes han llamado directamente a Ikea, nosotros también, ustedes les han ofrecido alternativas a Ikea, nosotros también... no es un empecinamiento del equipo de Gobierno esa ubicación, claro que se han ofrecido otras alternativas, pero los estudios realizados, en este caso por la mercantil, todos le llevan a que esa es la mejor ubicación para ese tipo de instalación", dijo.

En cuanto a la suspensión cautelar del TSJCV y la posibilidad de que finalmente el Plan Parcial no se llevara adelante, la primera edil apuntó que "el plan general nuevo ya contempla Rabassa, lo que ocurriría es que se tardaría más, pero Ikea podría estar en la ciudad de Alicante".

"Eso en el caso de que se anulara, por lo tanto tenga usted la seguridad de que pase lo que pase o dicte lo que dicte esa sentencia, la posibilidad de instalación de Ikea es exactamente la misma", aseveró.

"distinta vara"

Además, acusó a los socialistas de tener "distinta vara de medir" y de que su única oposición a Ikea es por su emplazamiento en Rabassa. En este sentido, indicó que municipios socialistas alicantinos como Mutxamel, Sant Joan d'Alacant o Benidorm se postularon para acoger el proyecto de la multinacional sueca, con una superficie comercial asociada, pese a las críticas a esta pretensión del PSPV en Alicante.

Castedo se preguntó así por qué los ayuntamientos gobernados por el PSOE aceptan la instalación con el mismo proyecto que para Alicante y aquí el PSOE lo rechaza. "No puede haber distintas varas de medir".

"No vamos a dejar pasar la posibilidad de que Ikea se instale en Alicante, dijo la alcaldesa, argumentando la aprobación de la modificación puntual número 31 y de su salida a exposición pública. Por este motivo era necesario hacer el trámite, porque de lo contrario "se cierra la puerta" a la posibilidad de que se instale.

Posteriormente, según añadió, ya llegará el momento de negociar las conduciones con Ikea y de hablar con comerciantes y todos los agentes sociales de la ciudad. "No vamos a consentir que Ikea se convierta en un arma política arrojadiza", zanjó.