La asociación de mayoristas de pescado de Mercasevilla consideró hoy que la sociedad mixta, participada por el Ayuntamiento hispalense y Mercasa, "no debería" asumir pasivos como la deuda de 1,2 millones de euros derivada de la disolución de su fundación socioasistencial o los nueve millones de euros implicados en la financiación del expediente de regulación de empleo (ERE) de 2007. En ese sentido, los mayoristas creen que si el déficit se reduce a 2,5 millones de euros, la situación sería "asumible".

El presidente de los mayoristas de pescado de Mercasevilla, Antonio Vela, rememoró en declaraciones a Europa Press que la "herencia" del que fuera director general de la sociedad mixta entre 1998 y 2002, José Espada, se tradujo en un déficit de aproximadamente seis millones de euros, por lo que ante el resultado de la auditoría externa elaborada por la consultora 'Deloitte', llamó a hacer un "acto comparativo". A su juicio, la situación de la empresa "no es catastrófica", sobre todo porque conserva "un patrimonio de unos 180 millones de euros".

La auditoría, ya elevada al Juzgado de Instrucción número seis, refleja que a fecha 30 de abril de 2009, la sociedad mixta arrastra un déficit de 2,5 millones de euros y afronta "pasivos" como 1,2 millones de euros derivados de la liquidación de la fundación socioasistencial o nueve millones de euros implicados en la financiación del ERE de 2007, porque 'Deloitte' no ha localizado documentos en los que la Administración autonómica firme su participación económica en este procedimiento.

Sólo en el periodo comprendido entre enero y abril de 2009, Mercasevilla acumuló pérdidas por valor de 280.000 euros, toda vez que el ejercicio 2008, cuando la directiva que encabezaban Fernando Mellet y Daniel Ponce repartía dividendos de 258.000 euros, el balance anual arrojó pérdidas por valor de 1.539.000 euros.

Elementos "totalmente diferentes"

A tal efecto, Antonio Vela advirtió de que Mercasevilla, la fundación socioasistencial y el ERE son "tres entes absolutamente distintos", —la fundación gozaba de hecho de su propia figura jurídica—, lo que le llevó a advertir de que la sociedad mixta "no debería" cargar con el lastre financiero derivado de la fundación y del expediente de regulación de empleo de 2007. "La fundación es la fundación, la empresa es otra cosa y el ERE es también otra cosa", resumió para reclamar que la sociedad mixta no afronte estas cargas.

En ese sentido, consideró que si Mercasevilla se desliga de tales aspectos, —la deuda de la fundación y el coste del ERE de 2007—, un déficit de 2,5 millones de euros "es totalmente asumible", sobre todo porque la era de José Espadas supuso un déficit próximo a los seis millones de euros. Así, se dirigió a la Consejería de Empleo y preguntó retóricamente "quien ha pagado las nóminas de los prejubilados —fruto del ERE— los dos últimos años", toda vez que la auditoría ha localizado alusiones al compromiso de financiación de la Junta, pero no documentos firmado por ésta. "Que se resuelva de una vez", dijo en alusión a la Administración andaluza.

Críticas al presidente del comité y al alcalde

Así, Antonio Vela dijo a Europa Press que Mercasevilla goza de "un patrimonio de unos 180 millones de euros, valores añadidos y una importante partida económica a plazo fijo", herramientas suficientes para "seguir adelante" sobre el "marco esencial" del traslado del mercado a los suelos de Majaravique.

No obstante, censuró que el presidente del comité de empresa, Rafael Domínguez (CCOO), se valga de "verdades a medias y mentiras enteras" para actuar en contra de la empresa al dibujar un escenario de "quiebra técnica", advirtiendo de que el líder sindicalista está "utilizando" a la plantilla o "siendo utilizado a costa de algo". Dedicó también palabras al alcalde y presidente del consejo de administración de Mercasevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE), , porque "no se acuerda de la empresa para nada" y debe "ponerla en funcionamiento, llenar el depósito y echarla a andar".