A pesar de la restricción, el personal de limpieza recogía a golpe de escoba durante la mañana de ayer «la misma cantidad de colillas que en días anteriores».
Con esta habitual postal amanecía ayer el aulario I y II, a pesar de la decena de carteles que bajo el lema Plan UA sin humos engalanan desde hace una semana las paredes del recinto.
De poco ha servido hasta el momento el entusiasmo de la dirección de la Universidad por adelantarse a la ley que a partir del próximo día 1 de enero prohibirá fumar en espacios cerrados.
El plan sin humos veta a los fumadores en todos los centros y edificios del Campus desde ayer, y les anima a apagar sus humeantes cigarrillos en los ceniceros que se han instalado a la entrada al recinto.
Los estudiantes, por su parte, aliviaban la vuelta al estudio entre pitillo y pitillo. Algunos han hecho caso omiso a los carteles, otros aseguran no tener «ni idea» de la prohibición.
Todos coinciden en que el día 1 de enero bajarán a la calle para encenderse el cigarrillo.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios