Según informaron fuentes socialistas en un comunicado recogido por Europa Press, el primer Comité Autonómico de 2010 concluyó con una resolución en la que se recoge las principales propuestas realizadas por el partido durante los últimos meses para buscar el cambio de modelo productivo.

Así, "frente a la incapacidad" del Ejecutivo autonómico, los socialistas plantean un trabajo basado en la "credibilidad, eficacia y consenso". Así, en primer lugar incidieron en solicitar un diagnóstico de situación mediante la creación de un Instituto Regional de Estadística.

"En política económica, sólo si se conoce la magnitud y la naturaleza del problema se estará en condiciones de abordar su solución con garantías", señaló la resolución, que abogó por acabar con el hecho de que Castilla y León "sea la única Comunidad sin un Instituto Regional de Estadística autónomo e independiente".

Asimismo, reiteraron que el Gobierno regional debe contar con familias, empresas y organizaciones sociales, y tener confianza en su capacidad de respuesta. Pero consideran que la Junta se tiene que ganar este respeto poniendo fin a "situaciones en las que pasan meses entre el anuncio y la aprobación de una medida".

"A nuestra Comunidad siempre le ha ido mejor cuando la Junta ha pactado con los socialistas de Castilla y León", subrayó el PSCyL, para destacar su propuesta de consenso. Este acuerdo se alcanzaría ya, según las mismas fuentes, en la creación del Plan Autonómico de Empleo 2010.

En este sentido, repitieron que plantean en 2010 un Plan Autonómico de Empleo similar a los 125 millones de euros del Plan de Convergencia de 2009, "dados sus buenos resultados". Estas medidas deberán centrarse, apuntaron, en sectores emergentes generadores de empleo, para fomentar el necesario cambio de nuestro modelo productivo.

Modelo productivo.

En cuanto al cambio de modelo productivo, llevaron al papel las propuestas concretas ya introducidas durante los últimos meses y con los pilares de la reestructuración del sistema financiero regional, la mejora de la competitividad del sector agrario y ganadero, "aprovechando la oportunidad que supone la Presidencia de España de la UE", y una nueva política industrial.

Del mismo modo, se insistió en la "lucha" contra los problemas de la despoblación y las desigualdades territoriales, cuya solución "pasa porque se aborden con seriedad y valentía política, con dotaciones económicas proporcionales a la magnitud del problema" y con un modelo territorial para Castilla y León, "que garantice la igualdad de oportunidades de todas las provincias y comarcas de la Comunidad de acuerdo con sus ventajas competitivas".

También recordaron sus disposición a consensuar, si la Junta lo plantea, el Plan Plurianual de Convergencia Interior, "el instrumento que establece nuestro Estatuto de Autonomía para alcanzar la cohesión territorial".

Por último, insistieron en que la lucha contra la despoblación tendría que ser "algo más que humo" e incluir "adicionalidad" en los recursos que financien las actuaciones. Entre sus objetivos destacaron la priorización de la generación de oportunidades de empleo adecuadas a la formación de los jóvenes, para evitar así que emigen a otras comunidades.

En el texto, también se introdujo una reflexión sobre las causas de la crisis económica que atraviesa tanto Castilla y León como España y de la que responsabilizaron a la "burbuja inmobiliaria" que entre 1996 y 2004 duplicó el número de trabajadores en la construcción, y que "cuando en 2007 explotó, provocó un ajuste mucho más intenso que el producido en el resto de Europa, con un coste laboral insoportable para cualquier economía de 820.000 empleos".

Sin embargo, consideraron que la respuesta del Gobierno de España a la crisis "ha sido la misma que la elegida por nuestros socios europeos para iniciar la recuperación", con el matiz adicional de "la lealtad a unos valores que llevan a primar la cohesión social por encima de otros objetivos, una conducta que en unas circunstancias como las actuales sólo se puede esperar de un Gobierno del PSOE, que siempre ha apostado por una respuesta social a la crisis".

Las "más de cien" medidas ejecutadas dentro del Plan E también recibieron los parabienes del PSCyL, que destacó los 8.000 millones de euros Fondo Estatal de Inversión Local, los 19.000 millones de euros inyectados en 2009 a través del ICO, los 4.070 millones de euros del Plan Integral de la Automoción, o la ayuda de 420 euros al mes a parados sin ingresos.

Más medidas en 2010.

A ello, añadieron que en 2010 España aún necesita medidas de estímulo económico y de protección social, que "están recogidas en los Presupuestos del Estado para 2010" y en la estrategia que promoverá "un modelo productivo más sostenible en los ámbitos económico, social y medioambiental" mediante la Ley para la Economía Sostenible.

En definitiva, aseveraron que "nadie puede dudar que ante una coyuntura muy volátil el Gobierno de España ha reaccionado para combatir y paliar los efectos de la crisis". En este ámbito, lamentaron que el PP "permaneció inmutable, con la única preocupación de rentabilizar el sufrimiento de los más débiles, y de proponer las mismas recetas que causaron la crisis".

En este escenario, subrayaron que las Comunidades Autónomas "no pueden ser simples comparsas", ya que creen que, "por su capacidad presupuestaria, y por su compromiso con los ciudadanos, están obligadas a hacer todo lo posible para paliar los efectos de la crisis, y para acortar su duración".