La asociación se pronunció así en un comunicado respecto al fallecimiento ayer de un joven de 24 años y origen esloveno, al quedar atrapado en un contenedor de ropa ubicado en el cruce entre la calle Vicente Zaragozá y Dolores Marqués.

La Fundación José María Haro-Intra, que fue creada por Cáritas Diocesana de Valencia para gestionar los aspectos relacionados con el empleo, tiene distribuidos unos 120 contenedores, en toda la Diócesis de Valencia, de los que unos 30 se ubican en la capital, para uso exclusivo de recogida de ropa, desde que firmó un convenio de colaboración con la Fundación 'Un sol mon' y Caixa Cataluña para la recogida de artículos textiles usados.

Al respecto, comentó que en los tres años en los que estos contenedores homologados para su uso específico están distribuidos por la ciudad, "ha tenido conocimiento, en diversas ocasiones, del robo de los productos que contenían, pero nunca antes de un suceso de estas características y por el que trasladó sus condolencias".

Los contenedores de la Fundación José María Haro-Intra llevan tres años instalados en Valencia capital y en otras localidades, y a través de ellos, la institución recoge ropa usada que después es clasificada, lavada, planchada y etiquetada por las personas que trabajan en sus talleres, personas en riesgo de exclusión social que acceden de este modo a un empleo de inserción que les facilita la entrada posterior en un empleo normalizado.

Posteriormente, la ropa se vende en las tiendas @rropa a precios muy económicos, cuyo importe íntegro se destina al funcionamiento de la fundación y a la creación de puestos de inserción social.