El Juzgado de Instrucción número 10 de Málaga ha acordado el sobreseimiento provisional de la causa iniciada contra el hombre imputado por la muerte de dos individuos que entraron en su finca de Alhaurín de la Torre (Málaga), denominada 'Los Naranjos', por la noche y supuestamente armados.

Los hechos sucedieron a finales de abril de 2009. Según un auto de la instructora, dictado los últimos días del pasado mes de diciembre, de las diligencias practicadas hasta ahora se desprende que los dos hombres entraron por la noche en la finca "portando ambos" armas de fuego y con el rostro cubierto, "defendiéndose" el procesado.

Además, en el documento, al que tuvo acceso Europa Press, se señala que los análisis efectuados determinan que los disparos "se realizaron a algo más de dos metros de distancia", y se estima procedente decretar el sobreseimiento provisional y archivo de las actuaciones iniciadas en su momento.

Los hechos tuvieron lugar en la finca del hasta ahora imputado, situada en el Camino de los Martínez. Tras recibir una llamada que alertaba del tiroteo, la Guardia Civil, que se hizo cargo de la investigación, coordinó un dispositivo en la zona. La jueza decretó en su momento libertad sin fianza para el hombre.

Los dos fallecidos iban indocumentados, según las primeras informaciones. La autopsia, practicada en el Instituto de Medicina Legal (IML) de Málaga, confirmó que fueron abatidos por impactos de bala de una escopeta de caza, cuyos disparos se realizaron a "una distancia corta".FAMILIA

Por otro lado, tras el archivo de estas actuaciones, la defensa, dirigida por el despacho Antiñolo-Davó, ha reiterado la petición de visita de su cliente a su hija, de 16 años ahora, a la que, según aseguraron desde el bufete, no ve desde hace casi dos años, cuando se produjo la muerte violenta de la ex pareja del hombre y madre de la niña en la misma finca.

Desde dicho despacho de abogados recordaron que presentaron una querella ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) contra el juez de Primera Instancia número 5, encargado de tramitar la custodia de su hija, por "no resolver" sobre el régimen de visitas y las peticiones planteadas por esta parte, algo que, según dijeron, "se sigue produciendo".

Esta querella fue archivada en mayo del pasado año. Paralelamente, según indicaron desde el bufete, se planteó una queja contra el juez ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), por la actuación "no sólo lenta del juzgado, sino maliciosamente retrasada con el evidente ánimo de perjudicar al cliente".

En ese escrito, se señalaba que "el juez está permitiendo que mi cliente pierda a su hija, a la que no ve, ni siquiera en un punto de encuentro; y con la que no puede comunicar, pues no le permiten hablar con ella por teléfono", estando a cargo de la hermana de la madre, a quien le otorgó la custodia.

Esta queja fue archivada, argumentando el Consejo que "no se ha encontrado indicios de responsabilidad disciplinaria" y que no pueden atender "reclamaciones que afecten a la función jurisdiccional de jueces y magistrados". En este sentido, desde el despacho Antiñolo-Davó aseguraron que se está estudiando volver a presentar una queja.