Según destaca el Sindicato Democrático de Ganaderos Montañeses en el último número del Boletín de Información Rural que edita UPA, uno de los grandes retos de la industria ganadera es la gestión de los residuos que genera, de modo que se minimice el impacto ambiental de los mismos.
La información del Boletín, recogida por Europa Press, explica que los residuos ganaderos son muy heterogéneos, ya que están formados por las deyecciones sólidas y líquidas (estiércoles y purines), por camas y restos de alimentos, productos fitosanitarios, antibióticos, etc.
Estos residuos tienen un alto potencial contaminante debido a su elevado contenido en materia orgánica y nitratos, y asimismo, son portadores de poblaciones microbianas que inciden negativamente en la salud humana y animal.
Según UPA, el problema de los excedentes de purines resulta especialmente preocupante en Cantabria, de ahí —dice— que el Sindicato Democrático de Ganaderos Montañeses (UPA-Cantabria), tenga entre sus inquietudes conseguir la valorización de los residuos orgánicos generados en sus explotaciones ganaderas.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios