De esta manera, agentes de la Unidad de Atestados de la Policía Local de Ingenio se acercaron hasta el lugar del accidente tras recibir varias llamadas de los vecinos de la zona, "pensando en un principio en lo peor", según aseguraron en el lugar.

El suceso tuvo lugar cuando el conductor, y presuntamente por un despiste, colisionó frontalmente contra la rotonda, quedando el vehículo apoyado sobre sus dos ruedas laterales por la fuerza del impacto. Así, no hubo que lamentar daños personales, produciéndose daños materiales tanto en el vehículo como en la rotonda y su señalización.