Los hechos se desarrollaron, según la sentencia consultada por Europa Press, a finales de septiembre de 2007 cuando una patrulla de la Guardia Civil interceptó a Custodio P.G. en su vehículo mientras circulaba por el kilómetro 7,00 de la N-323, con sentido a Jaén.

De este modo descubrieron que transportaba 2,95 gramos de heroína con una pureza del 23,4 por ciento y otros 21,22 gramos de cocaína, en este caso con una pureza del 76 por ciento. En el mercado estas sustancias hubieran alcanzado un valor de 2.376 euros y el fallo judicial especifica que estaban destinadas a la venta de terceras personas.

El ministerio fiscal calificó definitivamente estos hechos a efectos de una conformidad como constitutivos de un delito contra la salud pública de sustancia que causa grave daño a la salud, en el que aplicó la atenuante de drogadicción, y pidió que fuera condenado a tres años de prisión y se le impusiera una multa de 3.000 euros.

Así las cosas, en el juicio oral el procesado mostró su conformidad con la calificación del fiscal, de tal modo que fue condenado por ese delito contra la salud pública con la concurrencia de la atenuante de drogadicción a la pena de tres años de prisión y al pago de una multa de 3.000 euros.