De momento, las mediciones se han realizado en tres de las cuatro zonas en las que han dividido el barrio, y en todas ellas los niveles de ruidos han superado el límite establecido para declarar el barrio saturado, según explicó ayer la concejal de Esquerra Unida, Victoria González.

Además, la edil anunció que el Consistorio está ultimando una nueva ordenanza sobre el ruido. En la nueva norma destaca la posibilidad de incrementar la cuantía de las multas por exceso de ruido, la adecuación de los aparatos de aire acondicionado para reducir su impacto sonoro o la necesidad de obtener un certificado de insonorización de la vivienda.