La Dirección General de Tráfico pondrá el viernes en marcha una operación especial con motivo del puente de la Constitución para limitar al máximo los problemas en la circulación. Se prevé que desde el viernes y hasta el próximo martes, las carreteras aragonesas registren medio millón de desplazamientos en vehículos, la mayoría de ellos de particulares y autocares de línea, según la Jefatura Superior de Tráfico de Zaragoza.

Los puntos más conflictivos de la comunidad se centrarán en las salidas de las grandes ciudades, sobre todo en la A-2, en los accesos de Zaragoza, y en la N-232, en la travesía de El Burgo del Ebro. También se prevén importantes complicaciones, sobre todo el martes por la tarde, en los accesos a las estaciones invernales de esquí, que este fin de semana abren sus puertas.

La mayor intensidad de tráfico se registrará el viernes por la tarde de 17 a 21 horas, el sábado de 9 a 13 horas y el martes por la tarde, con el retorno tras el puente. La DGT destaca principalmente los problemas que se puedan dar en el regreso de las estaciones de esquí del Pirineo. Sólo en el Alto Aragón se prevén 300.000 desplazamientos, más de la mitad de todos los que aguantarán las carreteras aragonesas durante estos cuatro días.

Las mayores retenciones se prevén en el puerto de Monrepós, principalmente el domingo y el martes, de 17 a 20 horas. Tráfico recomienda a los conductores procedentes del Valle de Aragón, de Candanchú y de Astún, que usen la carretera de Puente La Reina a Ayerbe porque "estará más despejada", explican. "El carril único que hay en Monrepós por las obras ralentizará la circulación", asegura Andrés Fernández, jefe provincial de Tráfico.