Sí. Si extendiéramos el nivel de consumo de Occidente a todo el planeta, sería ecológicamente insoportable. O bajamos nuestro consumo o tendremos que impedir que otros se desarrollen, como hacen los Estados Unidos, porque si los países pobres utilizaran tanto petróleo, plástico y coches como nosotros, la supervivencia sería inviable.

 

 

Hay que apostar por las energías renovables para no depender del petróleo y ahorrar el máximo de energía. Además, deberíamos cambiar los hábitos alimentarios.

 

 

En cierto modo, sí. En la mitad del valle del Ebro se cultiva para dar de comer a los animales de los que nos alimentamos. Se necesitan 14 kilos de cereal para conseguir un kilo de ternera.

 

 

No somos ninguna excepción. Cada vez hay más tráfico y habría que potenciar un transporte colectivo barato y frecuente, así como el carril-bici. Además, debería haber ayudas para aislar las casas térmicamente, la mejor forma de ahorrar energía.

 

 

La gente lo desconoce y habría que hacer una gran campaña para concienciar sobre el exceso de consumo. Si la gente supiera que cada año mueren 8.000 españoles por la contaminación, quizá utilizaría menos el coche.

 

 

Víctor Frago es ingeniero químico y trabaja de operador técnico. Es miembro de Ecologistas en Acción.