Una boda de lo más distraída

Y llegó el gran día para la Casa de Alba. Cayetano y Genoveva se dieron el «sí, quiero» en un enlace repleto de famosos donde sólo pudieron ver a los novios los elegidos para la exclusiva.
La duquesa de Alba, con un traje rosa de Tony Benítez.
La duquesa de Alba, con un traje rosa de Tony Benítez.
A. Abeledo
La duquesa de Alba, con un traje rosa de Tony Benítez.
Además de los mediáticos invitados al enlace, la boda de Cayetano y Genoveva, celebrado el sábado en Sevilla, contó con otras sorpresas, como una improvisada fiesta de los vecinos agitando una bandera republicana a las puertas del palacio de Dueñas, o un taxista al que un invitado dejaba sin pagar. El evento tuvo desperdicio.

Una de las primeras en llegar fue la amiga de la novia, Paloma Segrelles. También se dejaron ver personajes como Lidia Bosch; el ex futbolista Emilio Butragueño y su señora; la condesa de la Maza, íntima amiga de la duquesa de Alba; los componentes del grupo rociero Siempre Así; María Chávarri; Fran y Cayetano Rivera; Gema Ruiz, con amigo incluido; El Litri y señora; el popular presentador Ramón García; el ministro Bono y su mujer; Carmen Tello y Curro Romero; o el torero Enrique Ponce con Paloma Cuevas.

El vestido de la novia... y el del novio

Nadie pudo ver a los novios en su gran día, a excepción de una conocida revista que pactó la exclusiva con la Casa de Alba. Genoveva llevaba un vestido de Manuel Mota, estilo años cincuenta. El traje constaba de dos piezas (palabra de honor y chaqueta manga larga) en voile de organza y encajes de chantillí. La cola medía más de dos metros y el velo casi cuatro. Cayetano vestía el uniforme de maestrante de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla que ya lució en la boda de Eugenia en 1998.

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