Para chico, predominan los bolsos que son como carteras y se cuelgan en bandolera: sirven para trabajar o llevar las carpetas de estudio. Normalmente son de colores serios, aunque hay modelos más atrevidos, de piel y de colores vivos. «Los hombres ya compran los bolsos como una prenda más; ha dejado de ser algo exclusivo de la mujer. Se venden mucho los modelos unisex, muy funcionales y discretos», explica Jesús Gutiérrrez, responsable de una tienda de la firma Skunkfunk. Lo que está claro es que para las chicas hay muchos más modelos. Esta temporada se llevan los de tela, adornados con brocados, pelo o flores.

También se ven mucho los de croché (tejidos con ganchillo), lana prensada y los de boca y cierre antiguo. Y en piel, triunfan los de colores (rojo, malva, verde...) que dan un toque divertido al atuendo. Otra línea muy de moda es la de los bolsos de poliéster de tamaño grande o mediano, en los que cabe casi de todo.

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