Diez velas soplan estos días los hermanos más famosos del pop-rock español. Una por cada año de una trayectoria que iniciaron en la localidad catalana de Cornellá con el ya familiar nombre de Estopa.

David y José Muñoz han grabado para celebrarlo un álbum con sus mejores temas cantados por amigos como Sabina o Los Chichos y remezclas realizadas por grandes figuras de la producción musical: Estopa X Anniversarivm (Sony Music), que saldrá a la venta el próximo 17 de noviembre.

Un documental recreando el concierto que ofrecieron en el bar de sus padres, La Española, antes de marcharse a por su primer álbum, corona los festejos. Además de un cómic y de una gira que comenzará en breve. José, el pequeño, dice que, aún hoy, todo esto es "impensable".

¿Quién les iba a decir que llegarían a esto?

La verdad es que es totalmente impensable lo que nos ha pasado. Se han cerrado muchos bucles, como que El del medio de Los Chichos esté en el disco y cantado por ellos. Hemos escogido para este álbum a referentes y también a gente de nuestra generación, con los que hemos compartido muchas vivencias, como Ojos de Brujo, Chambao, etc.

Tienen muchos amigos...

Cuando se propuso lo del disco, dimos una lista de los cantantes que queríamos tirando por lo alto, le echamos mucho morro y llamamos nosotros mismos, sin terceros de por medio. El no ya lo teníamos, y al final todos han quedado encantados, se nota cuando la gente hace las cosas con corazón.

¿Supondrá este aniversario un punto de inflexión en su carrera?

No, porque vamos a empezar enseguida a hacer una gira de invierno en sitios cerrados y ya tenemos compuesto el 80 por ciento de nuestro próximo disco, pero aún no hay fecha de publicación. Hacer un parón ahora mismo nos haría daño, no lo tenemos en cuenta.

¿De qué se sienten más orgullosos? ¿Y menos?

Nos sentimos orgullosos de poder haber llegado hasta aquí sin habernos convertido en unos perdidos de la vida y habiendo disfrutado. Hemos tenido la suerte de poder tomar nuestras propias decisiones. De todas formas, tenemos memoria selectiva y, que yo me acuerde, sólo hay cosas positivas (risas).

Además del disco, han hecho un documental...

En 1998, antes de grabar el primer disco, hicimos un concierto de despedida en el bar de nuestros padres para los amigos, la familia y los clientes. La idea era recrearlo y que estuviera la misma gente que entonces. Ha sido como un flashback, y lo han conducido El Terrat y Buenafuente con mucho arte y humor. Pero también tenemos un cómic y otro disco de remezclas...

¿Nunca se cansan el uno del otro?

No, porque como siempre hemos estado juntos, sentimos esa necesidad. Somos como un átomo, uno es el electrón y otro el protón (risas).

¿Qué futuro le ven al pop rock español?

Música siempre va a haber, se trata de evolucionar. Aunque a ver por dónde va la cosa, porque a veces si evolucionas demasiado puedes llegar a cagarla. Hay que descubrir grupos nuevos, refrescar el sistema. Otra cosa es cómo le irá a la industria...

¿Les falta algo por hacer profesionalmente?

Más canciones. Es también otra necesidad, porque en realidad es un hobby, aunque se de la coincidencia de que también es nuestro trabajo. En cualquier caso, el futuro lejano procuramos mantenerlo cercano.

¿Y en la vida?

Yo todavía tengo 30 años y me faltan por hacer muchas cosas. He sido tío, tendré que ser padre y abuelo, hasta he plantado árboles… (risas).

¿Qué harán para celebrar los 20 años?

Llamar a Raulito y Melody para cantar (risas). No sé, no queda nada para las dos X...

BIO. David (33) y José Muñoz (30) nacieron en Cornellá de Llobregat (Cataluña). Hijos de inmigrantes extremeños, trabajaron durante años en la compañía de automóviles Seat. Tras grabar una primera maqueta, que alcanzó mucho éxito con el boca a boca, llegó el álbum Estopa (1999), del que vendieron más de un millón de copias. Los Estopa han publicado cinco discos de estudio y han recibido, entre otros, dos Premios Amigo y dos Ondas.