Lidia y María Jesús son excepciones en un mundo de hombres. Una trabaja en el parque de Betanzos, la otra, en el de Carballo. Forman parte de un selecto club: sólo hay dos bomberas más en Galicia. Para mucha gente representan la igualdad laboral entre sexos.
Lidia Gómez. Con 29 años, en febrero cumplió su sueño de ser bombera en Betanzos. Casada, le gusta pasear y el fútbol.
«Vale más la maña que la fuerza»
¿Por qué se hizo bombera?
Siempre me gustó ayudar a la gente. Podía haber sido también policía, pero no daba el mínimo de estatura.
¿Qué requisitos tiene que tener una buena bombera?
Debe ser responsable. Además de tener una buena forma física y, sobre todo, mucha cabeza a la hora de actuar. Vale más la maña que la fuerza.
¿Por qué no hay más mujeres en su profesión?
Porque antes no había mujeres con la suficiente decisión para ser bomberas. Por suerte, la sociedad cambia y empieza a dejar de ser extraño.
En casa, ¿quién apaga el fuego con manguera cuando hay problemas?
Esta tarea nos la repartimos mi marido y yo. Quizá mi carácter me haga actuar más rápido... Y es que siempre mandan las mujeres, ja, ja...
¿Se ha sentido inferior por ser mujer en una intervención?
Nunca. Creo que cada uno tenemos una misión que cumplir, que no tiene que ser física. No me siento para nada distinta a mis compañeros.
¿Qué es lo más gratificante y lo más duro de su trabajo?
Ayudar a los demás es lo que más me gusta de mi trabajo. Lo más duro viene cuando tienes que ver a las víctimas de los accidentes.
María Jesús Vilariño. A sus 32, ya es jefa de turno en el Parque de Bomberos de Carballo. Tiene novio y le gusta la bici y el cine.
«Demuestro cada día que sirvo»
¿Por qué se hizo bombera?
Me encanta el estrés de salir corriendo para ayudar a alguien que te necesita. Tienes la sensación de que eres útil.
¿Qué requisitos tiene que tener una buena bombera?
Sobre todo, tener vocación y buena forma física. Creo que poca gente escoge esta profesión por el dinero y los días de descanso.
¿Por qué no hay más mujeres en su profesión?
Hasta ahora las pruebas físicas eran muy duras y era complicado acceder. Eso sí, soy la primera en decir que no quiero una mujer si no vale.
En casa, ¿quién apaga el fuego con manguera cuando hay problemas?
Mi novio y yo por igual. Cuando estoy con mi pareja me quito totalmente el chip de bombera y de mujer activa.
¿Se ha sentido inferior por ser mujer en una intervención?
Nunca me he sentido inferior, ya que se trata de un trabajo en equipo. Eso sí, por ser mujer demuestro que sirvo cada día, y eso se nota.
¿Qué es lo más gratificante y lo más duro de su trabajo?
Lo mejor es haber podido ayudar a la gente. Y lo peor es encontrar a niños heridos o muertos en accidentes e incendios.
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