La capital es muchas ciudades y el festival de referencia en la periferia vuelve a demostrarlo

Abajo la Cultura, no a los círculos cerrados. Contra el vicio de alejar, la virtud de divulgar. Ése, a grandes rasgos, es el espíritu de Madrid Sur, un certamen teatral con los grados de la veteranía —este año celebra su decimocuarta edición—, la coherencia y la calidad en su currículo. Esta cita, organizada por José Monleón, tiene dos claras señas de identidad: una, se realiza en diversos y muy poblados municipios de la periferia de Madrid, allí donde las grandes propuestas no suelen llegar; y dos, un marcado carácter sociopolítico con teatro comprometido contra la injusticia, el odio y el racismo, que acerca entre sí a las culturas del mundo. Y todo sin que el nivel de su programación decaiga.

Por eso este año será posible ver un nuevo Calígula a cargo de la compañía valenciana L’Om Imprebís; una versión de Muerte accidental de un anarquista, de Darío Fo, con la firma del solvente director de comedias Esteve Ferrer, o María Estuardo. Razón de Estado, de Schiller, comandada por Pedro Álvarez-Ossorio. En el cartel del certamen asoman también nombres como Salvador Távora, fiel a sus montajes de raíz flamenca, esta vez con Las Bacantes; David Desola y Roberto Cerdá, un tándem de autor-director que aborda en La charca inútil la caída libre del sistema de enseñanza; el comediant Joan Font, con Tren de sueños, un homenaje a los comienzos del cine, y Antonio Álamo, que une su humor corrosivo al de Ana López Segovia para exprimir el género de la chirigota en La maleta de los nervios.

Habrá como siempre danza y músicas del Mediterráneo (con la Orquesta Chekara, Khalid Benghrib, Ilham Loulidi y Ana Alcalde) y oportunidad de repescar trabajos ya estrenados, a menudo en circuitos minoritarios, desde dos producciones de Mr. Kubik, a Restos, una joint venture alternativa de José Ramón Fernández, Laila Ripoll, y Rodrigo García, entre otros.

Festival Madrid Sur. Varios municipios de Madrid / Del 2 al 25 de octubre