Los mediadores proponen un "nuevo sistema" de negociación para que las acciones sean "más fructíferas"

Representantes de las asociaciones que forman la patronal del sector metalúrgico de la provincia de Pontevedra y de los sindicatos se reunieron hoy en la sede de la Xunta en Vigo para retomar las conversaciones sobre el convenio colectivo del sector y, pese a que presentaron las últimas ofertas que ya tenían en julio, mostraron unas posiciones "flexibles" con el objetivo de llegar a un acuerdo.

La reunión, que contó con la mediación de la Xunta y la Inspección de Trabajo, se prolongó durante aproximadamente una hora, en la que ambas partes expusieron sus posturas e hicieron una declaración de "buena voluntad", ante la necesidad de cerrar un convenio para el sector.

En declaraciones a los medios al término del encuentro, el portavoz de la parte empresarial, Enrique Mallón, explicó que la patronal presentó la misma oferta de julio --un incremento salarial del 2 por ciento para el primer año y el IPC más 0,5 por ciento para el segundo y tercer año de vigencia-- pero "con posibilidades de hablar de los tres aspectos a los que se ciñó la negociación", en referencia a la vigencia, el incremento salarial y la jornada laboral.

Así, Mallón negó que su postura fuese "inmovilista" puesto que la patronal acudió al inicio de las negociaciones con la propuesta de prorrogar el convenio actual. Además, precisó que "aquí las posturas inamovibles no se pueden mantener por ninguna de las partes".

Sindicatos

Por su parte, el portavoz de la CIG, Miguel Anxo Malvido, destacó que la toma de contacto de hoy, tras el parón estival --la última reunión se desarrolló en julio--, fue "positiva", si bien consideró que "podría haberse celebrado antes".

En este sentido, destacó que los representantes de los trabajadores también ratificaron su última oferta --consistente en un convenio a dos años con incremento salarial del 4,5 por ciento el primer año y del 4 por ciento el segundo, entre otros aspectos-- pero incidió en que por parte de los trabajadores y las organizaciones sindicales "hay una cierta flexibilidad" en los puntos a negociar. Esta actitud, auguró, podrá servir para "llegar a un punto de encuentro" que posibilite el acuerdo.

Por su parte, el representante de CC.OO. Ramón Sarmiento, vio una posición "muy anclada" en la patronal, por lo que esperó que "se precipite un escenario que posibilite el acuerdo" y pidió a los empresarios que "tengan la buena voluntad que dicen tener".

Finalmente, el portavoz de UTG, Diego Atanes, incidió en la "unanimidad" de la propuesta sindical ya que, desde el inicio de las negociaciones, la postura de los representantes de los trabajadores "fue consensuada".

Nuevo sistema

El representante de los empresarios explicó que, en el transcurso de la reunión de hoy, los mediadores les propusieron "un nuevo sistema" para mantener la negociación y, en base a eso, "intentar que las actuaciones de las tres partes sean más fructíferas". Así, auguró que los encuentros serán "más dinámicos" y de menor duración, ya que "esto no puede alargarse en el tiempo".

Mallón se mostró "optimista" en cuanto al futuro de las negociaciones y aseguró que "la única salida es el acuerdo". "El conflicto no se nos pasa por la cabeza", apuntó, para añadir que "no lo permitirían ni las empresas ni los trabajadores".

Sin embargo, en cuanto a un posible nuevo escenario de conflictividad --este año se desarrolló una huelga de 26 días--, Sarmiento destacó que mientras no esté cerrado el convenio "la situación de conflicto está latente" ya que el hecho de no disponer de dicho texto perjudica sobre todo "a los trabajadores".

Situación del sector

Sobre la situación económico-financiera de las firmas del sector, Mallón destacó que "es todavía peor" que antes del verano y auguró un "panorama negro" pese a que, una vez terminada la huelga, "hubo una vuelta a la normalidad" en la actividad de las diferentes empresas.

Por su parte, los sindicatos aseguraron que el hecho de no tener convenio hace que los trabajadores tengan sus salarios congelados desde el pasado año.

Por otra parte, Malvido recordó que a final de año también terminarán los convenios de la metalurgia en las otras tres provincias gallegas y, en cuanto a la posibilidad de un convenio autonómico para el sector, recordó que en la situación del sector del metal de Pontevedra "están la gran mayoría de los convenios provinciales", que cifró en el 65 por ciento.

Para concluir, el representante de la UGT consideró que la "prioridad" es llegar a un acuerdo en el convenio del metal de Pontevedra y la posibilidad de un marco gallego es algo "que todavía no está valorado".