D. G., un hombre de 74 años, ingresó en el hospital Gregorio Marañón por una intoxicación con Digoxina, un medicamento que tomaba para corregir las arritmias cardiacas. Allí encontró la muerte semanas después. Una sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJM) ha señalado al centro hospitalario como responsable de su fallecimiento, y obliga al Sermas (Servicio Madrileño de Salud) a pagar una indemnización de 60.000 euros a la familia.

Según la sentencia, hecha pública por la Asociación El Defensor del Paciente, en el hospital "no se pusieron a disposición del enfermo los medios necesarios en atención a la grave sintomatología que presentaba". El tribunal llega a esta conclusión después de observar que el médico que lo atendió no lo trasladó a la UCI, a pesar de que su estado de salud empeoró gravemente.

El 7 de noviembre de 2005, el hombre empezó a sufrir taquicardias de forma persistente. Después de una semana sufriendo problemas en el corazón, en la madrugada del 13 al 14 se le complicó más todavía la salud: la fatiga y la dificultad respiratoria se hicieron insoportables, por lo que tuvieron que ponerle una mascarilla de oxígeno.

Empeora su estado de salud

A la noche siguiente su estado empeoró de forma alarmante, según recoge la sentencia. La enfermera llamó al médico de guardia, pero éste se limitó a suministrarle un diurético.

A las 5.00 h los síntomas de que algo fallaba eran evidentes: sudor frío, debilidad, nerviosismo, fatiga, cefalea e insuficiencia respiratoria. Cuando el médico volvió, a las 6.30 h, no tomó ninguna medida: esta vez se limitó a esperar su evolución y, poco después, se fue del hospital.

A las 9.30 h, la doctora encargada del nuevo turno fue a su habitación y se indignó por el lamentable estado en el que estaba el paciente. Inmediatamente, la médico determinó el traslado urgente del hombre a la UCI. A los pocos minutos, el paciente entró en parada cardiorrespiratoria y falleció. Le habían trasladado demasiado tarde.

El TSJM cree que el anterior médico debía haberlo ingresado en la UCI desde el primer momento. "La muerte no se puede calificar de inesperada, impredecible o impensable", concluye la resolución del juez.

La mitad de errores de España

Madrid acumula casi la mitad de las negligencias médicas de España. En 2008, la región registró 4.111 casos de errores sanitarios (entre denuncias y sentencias), según la memoria de la Asociación El Defensor del Paciente.

El Marañón es el hospital con más negligencias. Madrid es, además, la segunda comunidad que menos presupuesto por habitante destina al sistema sanitario: 1.170,56 euros, según la Federación de la Sanidad Pública.