Después de casi cuatro meses apartada de la vida pública, justo desde que se hicieron públicas sus imágenes con Federico de Dinamarca, Genoveva Casanova ha retomado su vida social.
Hace unos días, disfrutó de una divertida comida junto a unas amigas. Se trataba de la primera imagen de la exmujer de Cayetano Martínez de Irujo haciendo vida normal. A la salida del restaurante, de hecho, fue interceptada por las cámaras de Europa Press, que estaba haciendo guardia, pero la mexicana evitó responder las preguntas de la prensa.
De esta forma se hacía más que oficial la vuelta de Genoveva a la vida pública, tras reaparecer hace unos días en las redes con un mensaje en el que daba las gracias por el apoyo recibido estos meses y hacerse público su sonado fichaje por El Desafío.
Precisamente, la mexicana ha vuelto a utilizar las redes sociales, pero esta vez para comunicar quién es y ha sido su verdadero ángel de la guarda en todo este tiempo convulso. Se trata de su perro Taj, con el que ha compartido una bonita e íntima fotografía en la que Genoveva apoya su rostro en la cabeza de su mascota.
Taj, un can de 10 años, tiene hasta una cuenta propia en Instagram (@thetajtales) y se ha convertido en el mejor apoyo de la mexicana y en un miembro más de su familia.
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