Desde el pasado octubre, Tamara Falcó vive junto a su marido, Íñigo Onieva, en su nuevo piso en Puerta de Hierro, alejado del centro de la capital. La influencer ha ido descubriendo poco a poco a sus seguidores sus rincones favoritos de la vivienda.

La revista AD tuvo acceso a la casa de la hija de Isabel Preysler y a una entrevista en exclusiva con ella. "Es la primera casa que me he comprado, así que debía ser muy especial", expresó Falcó y la definió como una vivienda con "una mezcla de detalles clásicos y modernos" que le encanta. 

Refiriéndose al dormitorio principal, aseguró que para ella es su "templo sagrado". En la habitación es donde guarda alguna de sus piezas más valiosas, como su Virgen de la Alegría, que la protege y la acompaña cada día, según asegura en una de sus últimas publicaciones de Instagram. 

La influencer expresó que, "obviamente", la idea de poner una moqueta de color blanco en el dormitorio teniendo mascotas no era buena. "Es una locura maravillosa, pero cuando se estropee lo cambiaremos y listo", aseguró. 

Dentro de la propia estancia, no podía faltar un gran baño. "Cuando Íñigo vio esta impresionante ducha de piedra dijo: 'Nos mudamos', y así fue", expresó Tamara Falcó. 

No se olvidó de comentar la importancia del apoyo por parte de su marido durante el proceso. "Íñigo me animó mucho y juntos tomamos la decisión", declaró la hija de Isabel Preysler.