Los socorristas de Cataluña se han manifestado este martes por la mañana frente a la Generalitat para reclamar un decreto en todo el territorio catalán que regule el sector. 

En la protesta, los miembros de la plataforma SOS Socorristes y de UGT han desplegado pancartas, banderas y una silla de vigilancia para pedir la implantación de una temporalidad fija para todas las playas catalanas y una mejora de las condiciones laborales para los socorristas.

“Nos entrenamos, nos formamos, nos preocupamos por reciclarnos y no tenemos un convenio que esté adaptado a nuestras necesidades”, explica Ariadna Grau, socorrista y miembro de la plataforma. 

Grau se queja de que el convenio actual es de 1972 y no está adaptado a las demandas actuales y además, regula instalaciones deportivas, “trabajamos en espacios naturales, en aguas abiertas”, corrige la socorrista. Asimismo, asegura que el el convenio "no es acorde a los sueldos ni a la temporalidad ni al número de socorristas".

Temporalidad 

“Lamentablemente, aquí el verano no ha empezado porque es 20 de junio, el calor claro que sí, la afluencia de las playas también y con eso las muertes por ahogamiento que se podrían haber evitado”, dice Nacho Ibañez, socorrista y portavoz de SOS Socorristes.

Actualmente, los servicios de socorrismo de las playas catalanas se gestiona por ayuntamientos. Esto supone que la temporalidad varíe entre municipios.

Ibañez señala que, por ejemplo, en Sitges o Lloret de Mar la temporada empieza en abril, cuando la afluencia de gente en las playas empieza a crecer, algo que desde el sector consideran "normal" y sin embargo, otros municipios no activan el servicio de vigilancia hasta San Juan, una fecha demasiado tarde según ellos. A su parecer, con el decreto esto no pasaría. 

MIQUEL TAVERNA

“El año pasado en Cataluña fueron casi 30 (las muertes) y este año, ya en la Costa Brava hemos tenido que lamentar una muerte por ahogamiento de un hombre que estaba en una playa sin vigilancia”, explica el socorrista.

Condiciones laborales 

Entre las peticiones de los socorristas también reclaman mejoras laborales para ofrecer un buen servicio. "Pasamos nueve horas al día en la playa y realmente no estamos protegidos", explica Grau. 

Ibañez añade que en muchos casos tienen que trabajar jornadas completas, en alguna ocasión de hasta más de nueve horas, sin aseos, sin agua corriente y sin una enfermería en condiciones. Además de hacerlo sentados en una silla que supone un "riesgo laboral". 

Por eso, en las demandas a la Generalitat incluyen "infraestructuras que realmente nos protejan del sol, del viento y de las inclemencias", como podrían ser torres de vigilancia más avanzadas con techo y cristales polarizados.