Iñaki Azkuna anunció ayer que la Policía Municipal actuará con más contundencia pero, al mismo tiempo, exigió a la Ertzaintza y a los jueces que «no den respiro» a los «navajeros».
Tras descartar que los agresores sean producto de la inmigración, Azkuna lamentó que no se pueda responsabilizar a algunos bares y discotecas. «Hay unos pequeños hosteleros que se aprovechan de las circunstancias», afirmó.
La Policía Municipal mantiene desde hace meses operativos especiales en el Casco Viejo y en Deusto, donde han tenido lugar las últimas agresiones y actos delictivos.
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