La Audiencia de Barcelona ha archivado el caso de Kira López, la joven de 15 años que se suicidó en 2021 y cuyos padres acusaron a la escuela Pare Manyanet por presunto acoso escolar, y no ve indicios de que sufriera acoso escolar en el momento del suicidio.

La sentencia descarta la práctica de más diligencias y desestima los recursos de apelación interpuestos por la familia de la joven y por el Ayuntamiento de Barcelona.

La familia de Kira López y el Ayuntamiento de Barcelona recurren la decisión del juez de archivar la causa de acoso escolar

"Aún cuando dicho acoso -que las acusaciones perfilan como causa del suicidio- se hubieran producido, la competencia para conocer de dichos hechos sería la jurisdicción juvenil dada la edad de sus compañeros de clase y, no habiéndose dirigido el procedimiento contra ellos en ningún momento, dichos hechos estarían prescritos conforme a lo dispuesto en el artículo 15 LORPM" (Ley Orgánica reguladora de la responsabilidad penal de los menores), se indica en el auto de la Audiencia.

Esta instancia asegura compartir "plenamente las conclusiones alcanzadas por la Juez de Instrucción" en una anterior sentencia de finales del pasado 2022 y considera que el mensaje de correo electrónico con el texto 'muérete' enviado por un compañero de la clase de Kira tras fallecer ésta "no puede relacionarse con dicho suicidio".

Las explicaciones dadas por este joven, que aseguró que el mensaje se lo enviaba a su padre por la mala relación que tenía con él y que se adjuntó copia al correo de Kira por error, han convencido a los jueces.

Tampoco han considerado procedente tomar declaración a los tutores de la joven, como solicitaban los recursos de los padres y del Ayuntamiento de Barcelona, para aclarar el supuesto acoso escolar.

"No puede vincularse ese episodio (de acoso) con el suicidio, al menos desde el punto de vista penal" y se añade que "tampoco existen indicios de que sufriera un acoso en el momento del suicidio o inmediatamente anterior al mismo. Así se desprende de la investigación judicial y policial, pero también la efectuada a nivel educativo", se indica en el auto.

Prácticamente todos los compañeros de Kira, excepto una compañera, han negado la existencia de acoso a pesar de que hacen alusiones a una posible burla sobre su forma de hablar inglés, su tono de voz o el color de su maquillaje 'naranjito', "pero nada que pueda conformar una conducta sistemática de acoso imputable a una o más personas", según la Audiencia.

No se ve "necesaria" tampoco la declaración del coordinador ni otros profesores o de psicólogos del centro y también niega la declaración de los padres de la joven fallecida.

No obstante, en el auto se señala que, tras analizar los protocolos contra el acoso por parte del centro escolar Pare Manyanet, del distrito de Sant Andreu, "existe margen de mejora y requiere una intervención preventiva más decidida, como se desprende del informe del Síndic de Greuges".

"No se ha podido vincular la muerte de la joven con ninguna acción u omisión atribuible a una persona determinada, requisitos imprescindibles para la prosecución del proceso penal", se concluye en el auto, que recuerda que las cifras de suicidios entre adolescentes y adultos se han incrementado considerablemente tras la pandemia.