El Gobierno de Estados Unidos ha desclasificado miles de documentos sobre el asesinato del expresidente John Fitzgerald Kennedy en 1963, una decisión que había pospuesto por la pandemia de covid-19. Es pronto, nos dirán los historiadores, para saber cuáles son las novedades, los secretos nunca revelados de aquel magnicidio que marcó la historia de EE UU en la segunda mitad del siglo XX.

Hay que mirar, cruzar, comparar, analizar y sopesar documentos para saber si hay nuevas pistas sobre quién estuvo detrás de aquel asesinato. Fue hace casi seis décadas, pero ya en 1979, un informe del Congreso ya habló de "conspiración" para matar al presidente.

Biden desclasifica miles de documentos sobre el asesinato de Kennedy

El 70% de cerca de 16.000 documentos que los Archivos Nacionales de EE UU habían emitido anteriormente pero con tachaduras, han sido publicados ahora en su totalidad. Eso asegura la Casa Blanca en el memorándum que recoge la nueva desclasificación. Sin embargo, quedan aún muchos que no verán la luz ahora.

La CIA ha vuelto a imponer un veto parcial pese a que una ley de 1992 exige una divulgación completa

La CIA ha vuelto a vetar la publicación de miles de informes relacionados con el asesinato que, sin embargo, Biden se había comprometido a publicar. Y eso a pesar de que una ley de 1992 exige una divulgación completa. El actual director de la agencia, Bill Burns, fue uno de los responsables de la CIA que el año pasado envió a Biden una carta en la que se le pedía que se mantuviera aún en secreto parte de la información contenida en los archivos.

GTRES

Se han desclasificado más de 13.000 documentos y siguen ocultos unos 4.400. De modo que, según los Archivos Nacionales -que gestionan la Colección de registros del asesinato de Kennedy- cerca del 98% de todos los registros relacionados con el asesinato han sido publicados y sólo el 3% siguen sin ver la luz en su totalidad o en parte, calcula NBC News.

Creemos que toda la información sustantiva que se sabe que está directamente relacionada con Oswald ha sido divulgada"

El comunicado de la presidencia dice que permanecerán clasificados al menos hasta el próximo año "para proteger contra un daño identificable a la defensa militar, las operaciones de inteligencia, la aplicación de la ley o la conducción de las relaciones exteriores que sea de tal gravedad que supere el interés público en la divulgación".

LA CIA dice que lo importante ya se sabe

¿Qué dice la CIA? Algo así como que lo fundamental ya lo conocemos. "Creemos que toda la información sustantiva que se sabe que está directamente relacionada con Oswald ha sido divulgada", ha escrito la agencia en un comunicado. "Las pocas tachaduras restantes protegen los nombres de los empleados de la CIA, las fuentes, las ubicaciones y los modos de actuación de la CIA", asegura.

¿Hay un pedazo de papel que pruebe una conspiración? No. Pero hay pruebas de que la CIA tenía interés operativo en Oswald mientras JFK estaba vivo"

Los investigadores creen que hay una gran cantidad de documentos que podrían resultar vergonzosos para la agencia, cuenta el Miami Herald. La comunicación de la Casa Blanca asegura que "cualquier información que las agencias propongan para el aplazamiento continuo de la divulgación pública más allá del 30 de junio de 2023 se limitará al mínimo absoluto según el estándar legal".

FBI / EFE

Pero la historia ha demostrado que no se puede confiar en la CIA si de la verdad se raa. "¿Existe una prueba irrefutable? ¿Hay un pedazo de papel que pruebe una conspiración? No... Pero hay pruebas irrefutables de que la CIA tenía un interés operativo en Oswald mientras JFK estaba vivo". Es lo que tuiteó este jueves Jefferson Morley, experto en el asesinato de JFK y vicepresidente de la Fundación Mary Ferrell, que el pasado octubre demandó a la administración Biden y solicitó la publicación de todos los documentos restantes.

A primera vista, muchos documentos parecen estar publicados con tachones, según la Fundación Mary Ferrell

Ante los periodistas y tras la publicación de los nuevos 16.000 documentos, Morley cuestionó si la CIA estaba actuando "de buena fe" al negarle al público los informes completos. "Es control de daños, tirar un hueso... Esta farsa de no revelar información frente a una ley muy clara, la CIA ya no tiene el beneficio de la duda", exclamó el investigador.

Es más, miembros de esta Fundación Mary Ferrell han asegurado ya que, a primera vista, muchos documentos parecían estar publicados con tachones, es decir, como en versiones anteriores, relata el Herald.

Han pasado 59 años desde el asesinato del presidente John Kennedy y esto no tiene justificación"

"Han pasado 59 años desde el asesinato del presidente John Kennedy y esto no tiene justificación", ha comentado el juez John H. Tunheim, que entre 1994 y 1998 presidió la Junta de Revisión de Registros de Asesinatos, creada en virtud de la Ley de Recopilación de Registros de Asesinatos del Presidente John F. Kennedy de 1992, a favor de la cual votó Biden cuando fue aprobada por unanimidad en el Congreso.

George Joannides, el jefe de la guerra psicológica

Entre los 4.400 documentos que permanecen clasificados está la mayoría de los 44 relacionados con George Joannides y un programa encubierto relacionado con Cuba que entró en contacto con Lee Harvey Oswald antes de que Kennedy fuera asesinado, resume la CNN.

Joannides era el jefe de la guerra psicológica de la CIA en Miami en el momento del magnicido. La teoría de Morley es que este agente dirigió una operación que involucró a Oswald y algunos exiliados cubanos unos 3-4 meses antes del magnicidio de Dallas. La Fundación Mary Ferrell afirma que la CIA oculta la mayor parte de los documentos en cuestión.

Así, esos papeles confirmarían que Oswald era bien conocido por la inteligencia norteamericana, cosa que la CIA aún niega. Se da la circunstancia de que la agencia nombró a Joannides como contacto con el Comité de asesinatos de la Cámara de Representantes que completó su investigación en 1978 sobre lo ocurrido en Dallas en noviembre de 1963. Pero la CIA no dijo nada sobre la experiencia de Joannides con grupos de exiliados cubanos que, precisamente, estaba investigando el Congreso.

Lo que sea que haya en los archivos restantes es de tal naturaleza que ha empujado a la CIA a violar la ley"

La CIA asegura que es "falso" que oculte aún documentos sobre Oswald en los archivos de Joannides. "Creemos que todos los registros de la CIA sustancialmente relacionados con el Sr. Joannides se publicaron previamente, con solo pequeñas redacciones, como los nombres y las ubicaciones de los empleados de la CIA", dice la agencia en un comunicado.

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Según Fernand Amandi, otro investigador y estudioso del asesinato de JFK, lo que sea que haya en los archivos restantes es de tal naturaleza que ha empujado a la CIA "a violar la ley". Amandi opina que para la agencia "es mejor exponerse a la crítica pública y actuar literalmente en contra de lo que dice la ley norteamericana, es preferible hacer eso que tener antes que lidiar con lo que se puede publicar".

Oswald y los cubanos anticastristas de Miami

El Miami Herald recoge el testimonio de José Antonio Lanuza, exmiembro del Directorio Revolucionario Estudiantil, una organización anticastrista de exiliados cubanos activa en la década de los 1960. Esperaba que los documentos restantes confirmaran la sospecha de que él y otros miembros de esa organización fueron utilizados por Joannides para crear y luego difundir la "leyenda" o falso relato de que Oswald era un simpatizante de Castro, algo conveniente para explicar el asesinato de Kennedy.

Yo pienso que la CIA construyó esta leyenda... y cuando se viera a Oswald un idiota como yo iba a decir, oye, yo conozco a este tipo, este es un castrista"

Según Lanuza y otros testimonios y registros históricos, Oswald se acercó a exiliados cubanos y se ofreció a ayudarles a combatir a Fidel Castro. Sin embargo, poco después le encontraron repartiendo folletos de una organización procastrista y luego, en un programa de radio, expresó sus creencias marxistas.

Tres meses después, Oswald fue identificado como el asesino de Kennedy y Lanuza, que se ocupaba de hablar con la prensa, contó a los medios la historia del estadounidense procastrista que había asesinado al presidente.

"Yo pienso que esta gente [la CIA] construyó esta leyenda... ¿Por qué? Porque cuando se supiera que había matado a Kennedy, un idiota llamado José Antonio Lanuza, ese soy yo, de pronto la memoria le iba a decir, oye, yo conozco a este tipo, este es un castrista", le ha contado al Herald.