Así se lo han trasladado la directora general de Acción Comunitaria y Barrios Inclusivos, Mª José Cortell, y el director general de Infraestructuras Sociales, Enric Juan, a la concejala de Servicio Sociales, Julia Llopis, informa la administración autonómica.

Para la Generalitat, la construcción de este albergue ayudaría al Ayuntamiento a solucionar el problema con el que se encuentra para ofrecer una atención inmediata a las personas en situación de sin hogar ante situaciones concretas, como cuando en invierno se produce una bajada de temperaturas.

El departamento que dirige Mónica Oltra muestra así su voluntad de ayudar al gobierno local en el desarrollo de sus competencias, como la atención inmediata de estas personas, y complementarla a largo plazo a través de la concertación de plazas con entidades del tercer sector que trabajan en inclusión social.

Así, desde Conselleria se destinaría la inversión necesaria para la construcción del albergue, que luego sería gestionado por el Ayuntamiento dentro de sus competencias.

Por otro lado, la visita ha servido para mantener un encuentro con las entidades del tercer sector que gestionan plazas en albergues y viviendas dirigidas a colectivos vulnerables y en riesgo o situación de exclusión social, con el objetivo de que entren a formar parte del sistema público valenciano de servicios sociales.

El año pasado se puso en marcha, por primera vez y a través del concierto social, la creación de una red de plazas para este colectivo, más allá de subvencionar recursos concretos, con la intención de dar una mejor atención a la ciudadanía más vulnerable.

El concierto social, que ya se ha aplicado en otros sectores como diversidad funcional y salud mental, personas mayores o infancia y adolescencia, se ha extendido a las entidades que gestionan centros destinados a colectivos vulnerables como personas en situación sin hogar, personas con VIH, exreclusas, migrantes, LGTBI, mujeres en riesgo de exclusión social y otros colectivos en situación de vulnerabilidad.

Este sistema permite a Igualdad mejorar el servicio que ofrece a estas personas en su ámbito competencial, que va más allá de la atención inmediata que realiza el Ayuntamiento e implica una intervención más global.

En la primera convocatoria del concierto se sacaron 722 plazas en albergues y 543 en viviendas que son gestionadas a través de entidades de iniciativa social. Se asume así una de las grandes reivindicaciones del sector: pasar de la subvención al concierto y dar una mayor estabilidad en la financiación de las plazas.

La puesta en marcha de este concierto supondrá una inversión anual de la Generalitat de más 24 millones de euros, que permitirá garantizar una mejor atención a las personas que se encuentran en una situación de vulnerabilidad y de riesgo de exclusión social y a las que Conselleria tiene como colectivo prioritario a la hora de mejorar y reforzar recursos que permitan su inclusión en la sociedad.