Entre las medidas incluidas en el foro se incluye instar al Gobierno central a aprobar una ley integral integral para la abolición de la prostitución, medidas de atención social a las mujeres víctimas con el fin de que puedan abordar un nuevo proyecto de vida y una revisión de la normativa autonómica. En este sentido, ha anunciado que están revisando la Ley de Espectáculos Públicos para dirigir "actuaciones de prohibición de consumo de sexo en espacios y establecimientos públicos".

Así lo ha indicado a preguntas de los medios en Mislata, donde ha visitado la Oficina de Asistencia a las Víctimas del Delito (OAVD), al ser preguntada por el caso de Albal, localidad que ha impuesto, en aplicación de su ordenanza, una multa de 800 euros a un putero que denunció que una mujer prostituida le cobró sin completar el servicio.

La consellera ha resaltado que el agente que impuso la multa cumplió con lo establecido en una ordenanza municipal que es abolionista y considera que la prostitución es una forma de violencia sexual "y pone el foco no en ellas, que son víctimas sino en ellos, los puteros, en el consumo".

Bravo ha anunciado que la próxima semana presentarán las medidas para la abolición prostitución, elaboradas por el foro de expertos puesto en marcha hace unos meses, y que incluyen instar al Gobierno de España a aprobar una ley integral para la abolición de la prostitución, medidas de atención social para las víctimas y otras que pasan por la modificación de la normativa autonómica, como la referida de la Ley de Espectáculos.

"No podemos consentir que en establecimientos con licencias de hostal o cafeterías se esté mercadeando con el sexo de las mujeres y abusando de ellas y convirtiéndolas en un simple objeto de mercancía", ha dicho la consellera. Asimismo, ha apuntado que se presentará a la FVMP un modelo de ordenanza municipal abolicionista en unos términos similares.

En esta línea, ha indicado que su departamento está "buscando fórmulas" para poder centrar su acción en este área "no solamente en el espacio público sino también en la actividad que se desarrolla en los establecimientos públicos que sabemos que se aprovechan de la vulnerabilidad y de la pobreza en la que viven la mayoría de las mujeres prostituidas, muchas de ellas víctimas de trata, y tenemos que señalar el foco y sancionar, en el marco de nuestras competencias, al menos administrativamente tanto el consumo como cualquier tipo de aprovechamiento".

EADIOGRAFÍA

Según los estudios 'La radiografía de la prostitución en la Comunitat Valenciana 2021' y la I Encuesta de la Percepción de la Prostitución, uno de cada cinco varones valencianos, el 19,5% de los mayores de edad, reconoce haber pagado por sexo alguna vez en su vida mientras que se calcula que hay entre 10.000 y 13.000 mujeres víctimas de la prostitución en la Comunitat Valenciana que se publicitan en 52.000 anuncios, 164 clubes y 1.700 pisos.

Además, el 39% de la sociedad valenciana acepta la prostitución, aunque el 70% cree que las mujeres no la ejercería si pudieran elegir otro modo de vida. Estos estudios han servicio de base para las propuestas del 'Foro por la abolición de la prostitución', una entidad a la que se encargó la presentación de cambios legislativos que deben realizarse para revertir este problema.

En concreto, la radiografía muestra que el 14,5% de los varones valencianos ha tenido alguna experiencia esporádica, el 2,8 ocasional y el 1,9 recurrente. En términos globales, se calcula que entre 76.000 y 115.000 pagaron por sexo en el último año.

Otra de las conclusiones es que el 95% de las víctimas de la prostitución son mujeres y el 99,7% de los consumidores de sexo pagado sean hombres. De este modo, se constata que las mujeres sufren una desigualdad de género, pero además una desigualdad de clase, se ven obligadas o forzadas por su baja situación socioeconómica; étnica, si antes eran movimientos migratorios rurales a urbanos ahora son de terceros países en situaciones de extrema pobreza; y de edad, ellas tienen entre 18 años, o incluso son menores y 35 años, mientras que los consumidores de sexo comprado suelen ser siempre mayores.