La reunión de coordinación ha estado presidida por el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, y han participado responsables de los servicios municipales de Bomberos y Protección Civil, Policía Local, Infraestructuras, Parques y Jardines, Acción Social, Barrios Rurales, Unidad Verde y Prevención.

Tras la reunión, el concejal delegado de Bomberos, Alfonso Mendoza, ha comentado que en esta convocatoria del gabinete de crisis se ha abordado la avenida del Ebro, que "será extraordinaria" por la lluvia caída en los últimos días y la nieve que alimenta los ríos de la cuenca del Ebro.

En declaraciones a los medios de comunicación, Mendoza ha informado de que todos los servicios municipales implicados están activos desde el Cuerpo de Bomberos a la Unidad Verde o el área de Acción Social. "Todos los servicios que tienen algo que aportar están activos desde este viernes por la mañana", ha precisado.

Mendoza ha detallado que este viernes se ha activado el Plan municipal de Protección Civil, en fase de alerta, y se "modulará" según avance el río. "La experiencia nos hace saber que la avenida que se espera es importante y hay que ser capaces de estar preparados, como con la tormenta de nieve Filomena, para responder con la capacitación necesaria".

"SENTIDO COMÚN"

Por ello, ha indicado que ya ha hablado con los alcaldes de los barrios rurales más próximos al cauce, como Alfocea y Movera, que "podrían estar afectados" y también, mediante el convenio con la Diputación de Zaragoza que ya está operativo el servicios de bomberos se encargará de municipios de la comarca central, como Utebo y Pastriz, con cuyos alcaldes ha estado en contacto para estar prevenidos.

Alfonso Mendoza ha comentado que desde la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) están evaluando la avenida y "no se aventuran a predecir el comportamiento del río, pero será extraordinaria, con un caudal importante", ha reiterado. En las próximas horas se modulará el Plan de emergencia y "hay que tener precaución porque el río vendrá crecido y con fuerza", ha alertado.

Por ello, ha trasladado la recomendación de aplicar el "sentido común" al argumentar que "es bonito ver el río, pero con la distancia de seguridad adecuada". Así, Protección Civil revisará las riberas para evitar problemas porque el río "ha demostrado que es peligroso".

En este sentido, se mantendrán acotadas la zona de la Expo y el galacho Juslibol, que ya están cerradas desde la semana pasada, y se sumarán las zonas que la "experiencia dice que son inundables".

Mendoza ha concluido al avanzar que la reunión de coordinación del Plan municipal de Protección Civil se volverá a reunir este sábado para evaluar el estado del río Ebro, a su paso por el término municipal.