El Ayuntamiento de Vitoria realizó este lunes un llamamiento a la ciudadanía para que celebre el inicio de las fiestas en la plaza de la Virgen Blanca sin las habituales botellas de cava.

En un comunicado, el Consistorio argumentó esta petición en los "evidentes riesgos por cortes" y en los criterios medioambientales, ya que para elaborar y transportar las botellas de cava se gasta mucha energía y, por lo tanto, se producen grandes emisiones de CO2 a la atmósfera.

"Teniendo en cuenta que, además, el cava que se emplea en la bajada de Celedón no se usa para beber, el uso de ese vidrio no aporta nada y genera grandes problemas medioambientales, además de los riesgos que entraña por cortes", defendió.

Sin embargo, para quienes decidan descorchar una botella durante el descenso de Celedón, el Ayuntamiento detalló que se instalarán una docena de contenedores en la plaza de la Virgen Blanca (sobre las fuentes) y su entorno. Además, medio centenar de trabajadores y voluntarios de Jesús Obrero trabajarán en la recogida del vidrio.

Asimismo, recordaron que el descenso de Celedón es uno de los actos festivos con una mayor concentración de personas, "lo que ya de por sí supone un riesgo potencial". Para la prevención de situaciones complicadas, el Plan de Emergencia Municipal pone en marcha un dispositivo especial que contempla aspectos sanitarios y de seguridad.

A los puestos sanitarios del Punto de Atención Continuada (PAC) de la avenida de Santiago, y los instalados en la calle Mateo Moraza con Lehendakari Aguirre, el Ferial de Mendizabala y la plaza General Loma, se unirá un puesto de atención de emergencias en la Plaza España durante el comienzo de La Blanca.