En España, el precio de la vivienda usada alcanzó de media los 1.831 euros por metro cuadrado y acumuló una subida del 3,5% en comparación con el mismo mes del año pasado.

La vivienda se encareció en 14 de las 17 comunidades autónomas, y siete registraron alzas por encima de la media nacional. La comunidad en la que más subieron los precios fue Aragón, con un 2,3%, seguida de Baleares, un 1,8%, y Navarra, un 1,5%.

También se situaron por encima de ese 0,8% de media Castilla y León, con un ascenso del 1,2%, La Rioja, donde los precios subieron un 1,1%, Cataluña, con 1%, y Castilla-La Mancha, con un 0,9%.

En el caso de Canarias, los precios se revalorizaron un 0,7%, mientras que en Asturias se elevaron un 0,5%. En País Vasco, Galicia, Cantabria, Madrid y Murcia repuntaron un 0,3%.

Las únicas comunidades en las que se mantuvo el nivel de los precios de la vivienda fueron Andalucía y Comunidad Valenciana. Extremadura, por su parte, registró una caída de precios del 0,3%.

Baleares, además de experimentar una subida de los precios del 1,8%, también se convirtió en noviembre en la comunidad más cara, con el metro cuadrado a 3.319 euros. En Madrid, el metro cuadrado se pagó, de media, a 2.926 euros.

Las regiones más baratas fueron Castilla-La Mancha, con el precio del metro cuadrado a 880 euros, y Extremadura, a 946 euros por metro cuadrado.

En el desglose provincial, los datos de idealista concluyen que 37 provincias tuvieron subidas de precios en noviembre. Valladolid se situó a la cabeza, con un repunte del 6,7%, seguido de Zaragoza, con un 2,7%, y Cuenca, con un 2,5%.

Por el contrario, en Badajoz los precios cayeron un 1,7%, cifra muy similar al ajuste del 1,6% registrado en Córdoba.

La ciudad más cara para vivir es San Sebastián, donde el precio del metro cuadrado se situó en noviembre en 4.925 euros, seguida de Barcelona, con 3.918 euros, y de Madrid, con 3.673 euros.

Las más económicas son Lérida, con el precio del metro cuadrado a 1.030 euros, y Murcia, a 1.071 euros.