Antes íbamos de Abando a Unamuno en metro. Eso era hace ya meses, cuando nos gustaba decir que nuestra economía era de las más sólidas del mundo. Pero ahora dejamos el creditrans bien metido en la cartera, y enfilamos la calle Navarra hasta el Casco Viejo, a pie.

Tampoco el transporte público vizcaíno se ha librado de los recortes de la crisis. El número de usuarios de los medios de transporte públicos en el territorio bajó en 2008 un 1,8% respecto a 2007. Y si ha descendido se debe a que «en las distancias cortas el viajero ya no utiliza el transporte público, puesto que prefiere hacer el trayecto andando», explica Juan Cruz Nieves, director del Consorcio de Transportes Públicos de Vizcaya.

La caída ha sido leve, del citado 1,8%. Según los datos de CTB, el uso del coche particular cayó un 0,7%. Son, según sostiene el balance anual, esos nuevos parados que dejaron su vehículo en casa para coger el transporte público. En total, los trenes, metros y autobuses públicos vizcaínos trasladaron en 2008 a 180 millones de viajeros.

A los vizcaínos les gusta el creditrans, que es cómodo y abarata. Ya lo usan seis de cada diez pasajeros en el territorio. De 2007 a 2008, su implantación ha pasado del 54% de los viajeros al 58%.

También les gusta el metro. Bizkaibus y Bilbobus han perdido un 4% de usuarios. Además de los estragos de la crisis, CTB lo achaca a que la llegada del metro a nuevos pueblos ha restado clientela a  los autobuses.

Cómo nos gusta el metro

Hubo bastante cachondeo, con que si el suburbano de Bilbao era en realidad medio metro... Pero el caso es que hoy es un orgullo para la ciudadanía. El 64% de los vizcaínos sitúan al metro como su transporte favorito. Esto se debe a la buena fama que se ha ganado la puntualidad y limpieza de este transporte, y a que hoy día llega a los principales núcleos poblacionales del territorio vizcaíno.

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